La entidad Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), que se define a sí misma como "grupo de referencia de la sociedad civil española que lucha contra la discriminación antisemita y el hostigamiento contra el único estado judío", ha presentado, con fecha del 24 de febrero, un primer recurso contencioso-administrativo contra el decreto de alcaldía S1/D/2023-81, del 9 de febrero, por el cual la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, rompió relaciones con el Estado de Israel y suspendió temporalmente el acuerdo de hermanamiento de la capital de Catalunya con las ciudades de Tel Aviv y Gaza, firmado en septiembre de 1998 e impulsado en aquel momento por el alcalde Clos.
Según recoge un comunicado de ACOM del mismo viernes 24 de febrero, esta entidad habría conseguido anular 86 acuerdos institucionales, diez de los cuales refrendados por tribunales superiores de justicia y por el Tribunal Supremo, con sentencias que han incidido en la "inconstitucionalidad e ilegalidad de unas medidas excluyentes que vulneran el marco común de convivencia". De hecho, ACOM ya advirtió al principio de febrero que emprendería acciones legales contra Colau y el Ayuntamiento de Barcelona "por su discriminación antisemita" a raíz de la suspensión del hermanamiento de Tel Aviv con la capital catalana. En aquel momento, ACOM denunció que "el Ayuntamiento de Barcelona culmina su deriva y lleva Barcelona a la máxima expresión del sectarismo y la discriminación, convirtiéndose en la ciudad más abiertamente antisemita de Europa".
Triple derrota de Colau
En todo caso, esta entidad se ha esperado a la celebración del pleno del mes de febrero, donde Colau sufrió tres severas derrotas con relación al boicot a Tel Aviv, antes de dar el paso de emprender acciones legales. Conviene recordar que el pleno ordinario rechazó, en primer lugar, la iniciativa ciudadana defendida por la plataforma Prou impunitat, que defiende la ruptura de relaciones, y, en segundo lugar, aprobó una propuesta del PSC para censurar la decisión de Colau de romper el hermanamiento con la ciudad israelí de manera unilateral. La tercera derrota de la alcaldesa fue en el marco del pleno extraordinario, donde, una vez más, el pleno municipal rechazó las políticas de boicot a Tel Aviv e Israel. Eso sí, ninguna de las tres votaciones tiene efectos vinculantes, de manera que el decreto de alcaldía que suspende el hermanamiento continúa en vigor.
Hay que recordar, asimismo, que durante el pleno extraordinario, la líder de Valents, Eva Parera, también abrió la puerta a emprender acciones legales, ya que pidió "el informe jurídico que acompaña el decreto de alcaldía" con la intención de "asentar las bases para un futuro recurso para anular el decreto de alcaldía". De hecho, señaló que Colau "ha firmado un decreto que puede ser la base de una demanda por posible delito de odio".