El conflicto que hace décadas que enfrenta la Junta Constructora de la Sagrada Familia con los vecinos que podrían resultar expropiados por la construcción de la escalinata de acceso a la fachada de la Gloria tendría que estar resuelto en los próximos diez años, en paralelo al calendario que el mismo templo se ha fijado para la finalización de la basílica, porque aunque la ejecución de la escalinata de la calle Mallorca pueda quedar para más adelante, es evidente que cada vez está más cerca el momento de afrontar la cuestión, y más dado que el mismo Ayuntamiento de Barcelona se ha comprometido a encontrar una solución este mismo mandato.
Este viernes, quien ha movido ficha ha sido la Junta Constructora, que en el marco del acto de resolución de la primera convocatoria del Fondo de Acción Social del templo, ha abordado la cuestión señalando que se trabaja para encontrar "una solución adecuada". De hecho, el presidente delegado de la Junta Constructora de la Sagrada Familia, Esteve Camps, ha recordado, según recogen varias agencias, que el templo es propietario de terrenos en la manzana contigua a la afectada, en la misma calle Mallorca, entre Lepant y Marina, señalando que este solar "puede ser el punto de partida para una posible solución" para los vecinos afectados.
De hecho, una de las posibles soluciones al conflicto implicaría construir pisos en este espacio para realojar a los vecinos que sean expropiados, que según la clasificación del Ayuntamiento, podrían comprender entre 113 y 138 viviendas, que podrían cubrir toda la demanda de vecinos desplazados en el caso de una expropiación de mínimos. En todo caso, Camps ha remarcado que "primero hay que saber cómo quiere afrontar el Ayuntamiento la solución y cuál es su predisposición", pero también ha señalado que "no es ningún problema" el hecho de que "los vecinos hayan manifestado que no quieren marcharse del barrio". "Buscaremos la solución adecuada para que todos puedan quedarse en el barrio", ha añadido Camps, para apuntar que, en todo caso, eso supondrá "muchas reuniones", ya que "no se puede decidir de un día por otro".
"La cuestión es no cerrarse en banda, sino que buscamos soluciones de la mejor manera posible, y eso exige negociar con la administración municipal y, al mismo tiempo, con los vecinos", ha añadido Camps, que también ha destacado la actitud dialogante del ayuntamiento de Barcelona además de apuntar que con la asociación de vecinos, cuando se han tratado otros asuntos no relacionados con la escalinata, "hemos llegado a otras colaboraciones sin ningún problema, porque hablando la gente se entiende".
2,3 millones para impulsar 56 proyectos de entidades sociales
Con respecto a la primera convocatoria del Fondo de Acción Social (FAS), impulsado por la Fundación Junta Constructora del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, ha repartido 2,3 millones de euros entre 56 proyectos de entidades sociales. Entre estas hay seis organizaciones del barrio de la Sagrada Família, una de las cuales la asociación Dos de Deu, que está vinculada a la Asociación de Veïns Sagrada Familia. También recibirán esta ayuda entidades que trabajan en defensa de los derechos y la atención de personas migradas, como es el caso de Migra Studium. Destaca el proyecto del Teléfono de la Esperanza de la Fundación Ayuda y Esperanza, o Caminos de inclusión de Nexo Fundación Privada, que presta una atención especializada para niños y jóvenes y apoyo a sus familias. Camps ha aprovechado para indicar que la convocatoria de 2024 incrementará en un 50% el presupuesto y alcanzará los 3,5 millones de euros. Al mismo tiempo, ha manifestado que la voluntad de la junta es ir ampliando estas ayudas de forma progresiva en los próximos años.