Se repiten las mismas imágenes de largas colas en las tiendas del centro de Barcelona. Este martes festivo, los barceloneses han aprovechado para salir a hacer compras de Navidad, hecho que ha generado colas y esperas largas delante de las tiendas.
Segunda mañana consecutiva de colas en el centro de Barcelona. Centenares de personas se han desplazado para hacer compras de navidad aprovechando que no hay confinamiento municipal. pic.twitter.com/ppQeNx12oE
— Catalunya Información (@Catinformacio) December 8, 2020
Martes con tiendas abiertas a Barcelona y con mucha afluencia desde primera hora.
— El informativo | TVE Catalunya (@linformatiu_tve) December 8, 2020
⚡️ Imágenes de las largas colas para entrar al 'Primark' de Plaça Catalunya | @RTVECatalunya pic.twitter.com/gF7lycoVYL
Este martes es festivo pero en Barcelona y 41 municipios más de Catalunya los comercios están abiertos. Así lo solicitaron 42 municipios catalanes, los cuales intercambiaron el domingo 6 por el martes 8 como festivo en que pueden abrir los comercios. Sin embargo, los centros comerciales siguen sin poder abrir con normalidad, un hecho que está afectando a muchos comercios que están en el interior de estos establecimientos. Podrán hacerlo cuando se pase al tramo 2 del plan de apertura, el cual no fue aprobado la semana pasada a causa de los datos epidemiológicos.
Ayer lunes, día en que mucha gente estaba de puente, numerosos comercios del centro de Barcelona recibieron una gran afluencia de clientes. De hecho, algunos establecimientos colgaron el cartel de "aforo completo" y pidieron a sus clientes que esperaran fuera de la tienda, lo que provocó las colas.
Cada año, durante el puente de la Constitución, los principales ejes comerciales de Barcelona y otras ciudades se llenan de ciudadanos que empiezan a hacer sus compras para los regalos de navidad.
Sin embargo, este año las autoridades sanitarias han alertado repetidamente del peligro que comportan las aglomeraciones para la transmisión del coronavirus.
Cortes de tráfico
Además, la Guardia Urbana decidió cortar el tráfico en algunas calles del centro de Barcelona toda la tarde, desde las 14 horas aproximadamente, por la cantidad de vehículos que había en esta zona.
En concreto, se cortó Passeig de Gràcia en sentido descendente a la altura de Gran Via y únicamente circulaban los autobuses. Se hizo lo mismo en la calle Bergara con Balmes.
La Guardia Urbana decidió que no entraran más vehículos hasta que se vaciara el área porque había mucha congestión y porque incluso había habido problemas para salir de los parkings.