Ante la convocatoria de huelga de los trabajadores de limpieza y recogida de basuras de Barcelona desde el día 22 hasta el día 25 de diciembre, el departamento de Empresa i Treball ha decretado unos servicios mínimos que, a grandes rasgos, comprenden el servicio habitual de recogida y limpieza en entornos sanitarios así como garantizar la recogida de la basura orgánica y selectiva y la limpieza viaria -que incluye el vaciado de papeleras- una vez al día mientras dure el paro. Según recoge Europa Press, el Govern ha considerado que a causa de las fiestas de Navidad habrá un "incremento sensible" de los residuos, por lo cual ha considerado la necesidad de asegurar unos servicios mínimos.

La huelga de los trabajadores, que tiene el apoyo de UGT, afectará a las cuatro empresas concesionarias y, por lo tanto, tendrá lugar en todos los distritos de Barcelona, y empezará a las 22 horas del domingo 22 de diciembre y se alargará hasta la misma hora del día de Navidad, 25 de diciembre, es decir, en días en que hay un aumento generalizado de consumo. En el marco de estos servicios mínimos, Empresa i Treball pide que se mantenga el servicio habitual de recogida de basura y de limpieza en torno a centros hospitalarios así como la recogida de jeringas y animales muertos y, además, limpieza el mismo día o el día siguiente de los restos provocados por botellones.

Otros aspectos de los servicios mínimos son la recogida de basura orgánica "susceptible de descomposición" y también la recogida de basura en los mercados, así como resolver las "emergencias inaplazables" en el caso del mantenimiento del alcantarillado y las fuentes. En el caso de residuos voluminosos, habrá que recogerlos si impiden el paso de peatones o la circulación viaria. Estos servicios mínimos llegan después de que no se haya llegado a ningún acuerdo entre trabajadores y empresas con respecto a las peticiones de mejoras salariales de los empleados.

El jueves mismo, el Ayuntamiento de Barcelona hizo un llamamiento a incrementar las negociaciones con el fin de conseguir la desconvocatoria de la movilización. "La ciudad no se lo merece", señaló a la primera teniente de alcaldía de Barcelona, Laia Bonet, a la vez que confiaba en que fructificase el diálogo entre los sindicatos y las empresas concesionarias del servicio. Bonet recordó que el consistorio ha aportado 168 millones de euros más al contrato, un 10% más del previsto inicialmente, que daría margen a las empresas concesionarias para asumir las peticiones de aumento de salarios de los trabajadores. En todo caso, el acuerdo, de momento, no ha llegado.