Después de una importante movilización del taxi este martes por la mañana por el centro de Barcelona en demanda de una regulación rigurosa para las VTC que frene la actividad de empresas como Cabify, Uber y Bolt, la asamblea convocada por la principal asociación del sector, Élite Taxi, ha aprobado desplazar las futuras movilizaciones a otros ámbitos, en concreto al puerto, especialmente a las terminales de los cruceros, al aeropuerto y a la estación de Sants. Una decisión que, de momento, no incluye ninguna convocatoria concreta a la espera de que se puedan resolver sus principales demandas, que además del conflicto con las VTC incluye también la petición de poner sobre la mesa otra cuestión, el elevado precio de los seguros.
Así, después de una marcha lenta en que habrían participado, según Tito Álvarez, portavoz de Élite Taxi, unos 1500 vehículos, los taxistas se han reunido en asamblea en la Gran Via entre paseo de Gràcia y la calle Casp, donde, entre petardo y petardo, y con media hora de retraso sobre el horario previsto, Álvarez ha recordado que "Barcelona es un referente de la lucha contra las plataformas" y eso ha sido posible gracias a que "el taxi de Barcelona no solo se defiende, es que ganamos", añadiendo que el negocio de las VTC "no es progreso, es esclavitud" y exclamar que por eso mismo, la decisión del sector es "echarlos".
Reunión con el ministerio pasado el 9-J
Aunque la principal reunión de la movilización es la exigencia de un decreto por parte del Govern para regular las VTC por la vía de urgencia, Élite Taxi ha introducido también la cuestión de los seguros, ya que según Álvarez, se pagan "más de 3.000 euros por un seguro a terceros". Por eso ha recordado que obtuvo de Salvador Illa el compromiso de tratar la cuestión con el ministerio de Transportes y ha anunciado que ya se está trabajando en un encuentro con la máxima responsable del transporte terrestre una vez pasadas las elecciones europeas para tratar la cuestión, y también para pedir que se habilite las comunidades autónomas para que puedan regular el sector.
En todo caso, Álvarez ha llegado a la asamblea con la propuesta de sacar del centro de Barcelona futuras movilizaciones, con el objetivo que "los millones de turistas vea el nivel de lucha social de Barcelona" y por eso ha apuntado que si no se consiguen las demandas que se presentará al ministerio así como las que se piden a la conselleria de Territori, "empezaremos a cortar el puerto de cruceros y el aeropuerto". Para remachar el anuncio, Álvarez ha fijado la fecha del 1 de septiembre para tener ya la regulación de las VTC o del contrario, "movilizaremos a todo el sector".