El Ayuntamiento de Barcelona avanzará a partir de septiembre una hora el cierre de terrazas en cinco plazas del distrito de Gracia. La medida será efectiva todos los días de la semana entre los meses de abril y octubre, así como los fines de semana y festivos entre octubre y abril. De esta forma, el gobierno de Ada Colau quiere reducir el máximo posible el ruido nocturno que afecta a los vecinos de la zona. Es una medida que se engloba en el marco del despliegue de las Zonas Acústicamente Tensadas a Horario Nocturno, un mecanismo a disposición de los distritos para impulsar planes de reducción de la contaminación acústica adaptados a cada uno en concreto.
Las plazas a las que afecta este nuevo horario son Sol, Vila de Gràcia, Virreina, Diamant y Revolució, aunque se implantarán otras medidas para la reducción de ruido que también afectarán a las plazas Joanic y Raspall. Las medidas afectan a una veintena de establecimientos y el horario de cierre se avanzará de las 24 horas a las 23 entre semana y de la 1 a las 24 los fines de semana de abril a octubre, mientras que el resto de meses del año los fines de semana pasarán de cerrar a la 1 a tener que hacerlo a las 24. Para compensar la reducción horaria, los establecimientos de las plazas Sol, Vila de Gràcia y Diamant podrán ampliar sus terrazas en dos mesas. En el caso de la plaza Revolució podrán ampliar una mesa.
Lo ha explicado este martes el concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica del Ayuntamiento de Barcelona, Eloi Badia, en una rueda de prensa en que ha explicado los planes para reducir la contaminación acústica en las calles y plazas de los distritos de Gràcia y Sants-Montjuïc consideradas Zonas Acústicamente Tensadas a Horario Nocturno. El distrito de Sants-Montjuïc también adelantará el cierre de terrazas y establecimientos en la plaza de los Jardines del Mediterráneo.
La calle Enric Granados y Ciutat Vella, los primeros
La primera área afectada por esta medida fue la calle Enric Granados de Barcelona y, seguidamente, los restaurantes y terrazas del distrito de Ciutat Vella. De hecho, la calle Enric Granados cuenta actualmente con 115 licencias de este tipo, 81 de las cuales son ordinarias y las 34 restantes se concedieron para ampliar o añadir terrazas por la pandemia de Covid. Las actividades de restauración en las zonas del Raval, donde está el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA), y del barrio Gótico avanzarán el cierre de las 3 a las 2 horas, las terrazas a las 23 horas durante toda la semana, y los comercios de venta alimentaria, como supermercados pequeños, tendrán que cerrar a las 22 horas. Las terrazas de la calle Enric Granados cerrarán a las 23 horas los viernes y la medianoche para los sábados.
Reducir la contaminación acústica
El plan para reducir la contaminación acústica se adopta después de que los resultados de los sonómetros instalados en el céntrico paseo del Eixample mostraran que se superan de manera continuada en tres decibelios los límites permitidos por la noche. En esta calle, el tope de decibelios durante el día es de 65 y de 55 a partir de las 23 horas, pero los sábados a las 12 horas, por ejemplo, consigue unos 70 decibelios. La medida de adelantar en una hora el horario de cierre de las terrazas se comunicará formalmente en los establecimientos que vean afectada su actividad, para que puedan hacer alegaciones y durante este periodo se seguirán haciendo mediciones de ruido para confirmar que continúan las superaciones de los umbrales.