Cuando ha pasado un año del inicio de las obras de la prolongación del tranvía entre la plaza de las Glòries y la de Verdaguer ya empieza a ser tangible el resultado final, aunque todavía queda casi otro año de obras. Desde que llegaron los primeros raíles que la obra ha tomado forma, por lo menos, con respecto a su resultado visual, porque ahora ya se puede ver claramente por dónde pasará el tranvía y cuál será su afectación en la avenida Diagonal, además de que la instalación de la primera marquesina, situada donde estará la parada de Sicília, ayuda a hacerse una idea cabal de cómo quedará todo.
De hecho, está previsto que esta prolongación, que permitirá comunicar Glòries con Verdaguer en siete minutos con dos paradas intermedias en Monumental y Sicília, entre en servicio a principios de 2024, con la intención de dar la obra por acabada a finales de este mismo año para a continuación empezar con las pruebas técnicas necesarias para garantizar la efectividad y seguridad de un servicio que, a diferencia del tranvía actual -tanto el TramBaix como el TramBesòs-, funcionará sin catenaria aérea, ya que la toma de corriente estará por un tercer carril situado en el suelo con el sistema de Alimentación Continúa por Tierra (ACT), que solo suministrará energía cuando pase el tranvía, garantizando la seguridad de los peatones en todo momento.
A un año vista de la entrada en servicio este lunes se han efectuado las primeras soldaduras de los raíles, que ya lucen en su configuración definitiva en un buen tramo de la Diagonal entre el paseo de Sant Joan y la calle Sicília, la excusa perfecta para una visita de obras que ha contado con la presencia de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el conseller de Territori, Juli Fernández, que han visualizado el acuerdo entre comunes y republicanos en esta obra y, lo más importante, en la voluntad de finalizar la prolongación hasta Francesc Macià y activar la unión de las dos redes de tranvía.
"Encabalgar las obras"
Tanto es así que más allá del progreso de las obras, se ha hecho mención explícita del hecho de que ya se está redactando el proyecto ejecutivo de la segunda fase de conexión entre Verdaguer y Francesc Macià con la voluntad "de encabalgar las obras", según ha apuntado Colau, de manera que tan pronto como finalice una fase ya esté en marcha o a punto de arrancar la otra. Todo para concluir lo que para Colau es una "obra de sentido común" y que para Fernández es la oportunidad de ser "una realidad toda entera". De momento, sin embargo, a corto plazo el objetivo es conectar Glòries con Verdaguer en siete minutos, con la previsión de aumentar el número de pasajeros del TramBesòs en un 58%, con unos 19.000 viajes adicionales en día laborable.