Llevar el Metro hasta el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona -popularmente llamado can Ruti- fue un proyecto que estuvo sobre la mesa al principio de este siglo, pero que finalmente ha quedado descartado y relegado al olvido. Con todo, un panel informativo semiabandonado en un pozo de acceso de la L-10 Nord del Metro todavía mantiene un plano donde se puede ver como tenía que ser aquel proyecto.
El panel en cuestión se encuentra en los jardines públicos del Antic Escorxador de Badalona, a medio camino entre las estaciones de La Salut y Gorg, y descubrirlo supone un pequeño viaje al pasado, a un proyecto que ha quedado enterrado por el paso del tiempo, pero que allí continúa, recordando que en un momento dado, había planificada una línea de Metro que incluso tenía número, el 13, y color, un rosa fúcsia.
En metro hasta Can Ruti
El objetivo final del proyecto de la L-13 era el Hospital dels Germans Trias i Pujol, para facilitar el acceso al principal equipamiento sanitario de Badalona y hospital de referencia del Barcelonès Nord. Hay que tener en cuenta que este hospital está bastante separado del núcleo urbano y ubicado en la entrada del parque de la Serralada de la Marina. Aunque actualmente está conectado con Badalona -y también con Barcelona- por un eficiente servicio de autobuses, con más de cinco líneas que confluyen allí, acceder en metro habría sido un avance importante para los usuarios.
Según el plafón que todavía se conserva, el otro punto de la línea 13 tenía que ser la estación de Morera, la última en el núcleo urbano de Badalona y a dónde llegaría la L-2 gracias a la construcción de tres nuevas estaciones, Badalona Centre, Casagemes y Can Canyadó. Con todo, la línea 2 se paró en Badalona Pompeu Fabra en el 2010 y, de momento, no hay ninguna previsión de alargarla. De hecho, en el Plan Director de Infraestructuras (PDI) de la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM) 2021-2030, en revisión de abril del 2021, ni se contempla esta posibilidad.
Metro ligero
La línea 13 se incluyó en el PDI 2001-2010 como un proyecto de línea que conectaría Badalona Pompeu Fabra con Can Ruti con seis estaciones, pero que posteriormente quedó limitado a una conexión tipo lanzadera entre Morera y Can Ruti, que en algún momento podría haber tenido una parada intermedia en Canyet.
En concreto, se especificaba que después de hacer llegar L-2 hasta Badalona Centre -que tampoco se ha hecho- se preveía "una posible prolongación (o alternativamente, una conexión con otro modo) para dar servicio a los barrios de Casagemes, Can Canyadó, Morera y Can Ruti". También se señalaba que "la segunda fase, tramo Badalona Centre-Can Ruti, se podría construir como metro ligero" y se indicaba que "a partir de Casagemes, y dado que el núcleo urbano se 'adelgaza', no queda justificada la coexistencia de una línea de metro y la actual de Renfe del Maresme, razón por la cual se opta por desviar el trazado hacia el interior y servir a los barrios de Can Canyadó y de Morera, acabando en Can Ruti".
En todos los casos, l'L-13 se proyectaba como un metro ligero, similar al actual L-11 que conecta Trinitat Nova con Can Cuiàs. Como en este caso mellizo, la nueva línea sería una prolongación natural de otra línea, pero con metros de capacidad reducida, para dar servicio a un menor número de usuarios que las líneas de Metro convencional.
Pantone 232C
De hecho, el proyecto fue algo más que un trazado sobre un plano. Según informaron varios medios de la época, en julio del 2002 la ATM seleccionó los colores de varias líneas de TMB y FGC, entre los cuales algunos de pleno uso en la actualidad, como el color morado de la L-6, el marrón de la L-7, el rosa de la L-8, el naranja de la L-9, el verde de la L-11 y un beige para l'L-12 -en un proyecto que tenía que enlazar Sarrià con Castelldefels y que actualmente sólo incluye una parada, la de Reina Elisenda, y otro color, un lila pálido-. Al proyecto de línea 13 se le asignó también una tonalidad de rosa, la que corresponde al Pantone 232C.
¿Olvidado del todo?
Aquel proyecto acabó decayendo y no figura ni siquiera en unas previsiones de futuro que según el PDI vigente incluyen muchos otros proyectos -la prolongación de la línea 1 hasta Badalona, la llegada de l'L-4 en la Sagrera o la finalización del eterno tramo central de la línea 9-, sin embargo, como muestra que algún día estuvo sobre la mesa, basta con dar un paseo por el Antic Escorxador de Badalona, y observar cómo el pasado todavía forma parte del presente.