Varias decenas de vecinos del barrio de Gràcia, en Barcelona, se han concentrado esta mañana en las fincas de los números 15 y 17 de la calle Encarnació para intentar impedir el derribo de dos casas y la tala de una encina bicentenaria existente en uno de los solares, como pretende a una promotora para construir pisos.
Varias entidades vecinales como "Gràcia cap a on vas" o el "Sindicat d'Habitatge de Vallcarca" dan apoyo esta movilización, que denuncia que el ayuntamiento "haya cedido al único interés de unos especuladores".
Los vecinos piden el ayuntamiento que declare la encina como árbol protegido, catalogue las dos casas y no se permita a la promotora seguir adelante con sus planes.
La tala, parada
De momento, esta mañana el concejal de Gràcia, Eloi Badia, ha informado que se ha parado la tala y se ha instado a los promotores a mantener una reunión para paralizar el derribo de los immuebles.
La promotora ya ha talado algunos árboles que se encontraban en estas fincas, como un pino, un cedro y una palmera centenarios, según han mostrado los manifestantes a través de las redes sociales.
Trias pide que el Ayuntamiento compre las casas
El presidente del grupo municipal del PDeCAT y exalcalde, Xavier Trias, ha pedido que el Ayuntamiento de Barcelona compre las centenarias casetas de la calle Encarnació, que esta mañana un centenar de vecinos han impedido derrocar.
Trias ha anunciado que su grupo presentará el ruego formal en el gobierno municipal de comprar estas fincas del barrio de Gràcia y las destine a equipamientos de barrio y espacios verdes.
El exalcalde ha asegurado que el ayuntamiento "puede hacer esta operación", aunque los propietarios tengan ya las licencias para derrocarlas y construir 28 viviendas y que con la compra municipal ya no se tendría que talar la encina centenaria que hay en uno de los solares.