La lombarda, también conocida como col morada, es mucho más que un colorido ingrediente en ensaladas y guarniciones. Este vegetal crucífero, pariente cercano del repollo blanco y el brócoli, está cargado de nutrientes y compuestos bioactivos que ofrecen múltiples beneficios para la salud. Su llamativo color púrpura no solo embellece los platos sino que también indica la presencia de potentes antioxidantes. Exploraremos aquí por qué la lombarda debería ser una adición regular en nuestra dieta.

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La col lombarda es una excelente fuente de vitaminas C y K/ Foto: Unsplash

 

 

Rica en nutrientes vitales

La lombarda es excepcionalmente baja en calorías pero rica en vitaminas y minerales esenciales. Es una excelente fuente de vitamina C, un poderoso antioxidante que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, mejora la salud de la piel y fomenta la absorción de hierro de otros alimentos. También es rica en vitamina K, esencial para la coagulación de la sangre y la salud ósea. Además, proporciona una buena cantidad de vitaminas del grupo B, vitamina A y minerales como potasio, que es vital para la función muscular y nerviosa, y el mantenimiento de la presión arterial normal.

 

Antioxidantes abundantes

Uno de los aspectos más notables de la lombarda es su alto contenido de antioxidantes, especialmente antocianinas, los pigmentos que le dan su característico color púrpura. Las antocianinas son conocidas por sus propiedades antiinflamatorias y se ha demostrado que reducen el riesgo de enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. También mejoran la salud cerebral y podrían ayudar a prevenir el deterioro cognitivo relacionado con la edad.

 

Fibra para la digestión

La lombarda es una fuente rica en fibra, un componente esencial para una digestión saludable. Consumir suficiente fibra ayuda a mantener regular el movimiento intestinal y puede prevenir problemas como el estreñimiento y las hemorroides. Además, una dieta alta en fibra se ha asociado con un menor riesgo de enfermedades crónicas como diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas.

 

Las investigaciones indican que los crucíferos, como la lombarda, contienen compuestos sulfurosos que pueden ayudar en la prevención del cáncer al inhibir el crecimiento de células cancerosas y proteger contra la exposición a carcinógenos

 

Propiedades antiinflamatorias

El consumo regular de lombarda puede tener efectos beneficiosos en la reducción de la inflamación en el cuerpo. La inflamación crónica es un factor de riesgo para muchas enfermedades graves, incluyendo enfermedades cardíacas, artritis y ciertos tipos de cáncer. Los compuestos encontrados en la lombarda, como las antocianinas y otros flavonoides, juegan un papel importante en la reducción de esta inflamación.

 

Potencial de salud cardiovascular

La lombarda puede desempeñar un papel significativo en la salud cardiovascular. Los altos niveles de potasio y el contenido de fibra pueden ayudar a mantener la presión arterial en un rango normal, mientras que los antioxidantes protegen contra el daño de los radicales libres, que puede conducir a la acumulación de placas en las arterias. Además, estudios sugieren que las dietas ricas en crucíferos están asociadas con un riesgo reducido de enfermedades cardiovasculares.

 

Prevención de enfermedades crónicas

Además de su papel en la prevención de enfermedades cardiovasculares, la lombarda también puede ayudar a disminuir el riesgo de otros trastornos crónicos. Las investigaciones indican que los crucíferos, como la lombarda, contienen compuestos sulfurosos que pueden ayudar en la prevención del cáncer al inhibir el crecimiento de células cancerosas y proteger contra la exposición a carcinógenos.

 

En resumen, la lombarda no solo es versátil y deliciosa, sino también un superalimento que puede contribuir significativamente a nuestra salud general. Incorporar lombarda en nuestra alimentación es una manera sabrosa y efectiva de aprovechar sus múltiples beneficios nutricionales y terapéuticos.