Si has empezado una dieta para adelgazar, o estás pensando en hacerla, puede que te hayas preguntando si el descanso influye en el peso corporal. La realidad del descanso es que tiene alguna influencia en el peso corporal. Lo que ha ocurrido es que no ha habido, hasta hace poco, estudios concluyentes que demostraran la relación. Lo cierto es que el término medio es lo más beneficioso para nuestro cuerpo cuando hablamos de dormir. En cualquier caso, tenemos que destacar los siguientes aspectos que se derivan de estudios científicos.
Dormir adelgaza si duermes lo que te toca
Los estudios científicos señalan que las personas que duermen más de 7 horas pueden quemar más calorías. De hecho, se ha calculado que la reducción de las probabilidades de padecer obesidad pueden ser de hasta el 36%, una cifra muy a tener en cuenta. Muchos especialistas coinciden en que hay una relación directa entre dormir las horas debidas y la salud. El consejo es que los adultos duerman entre 7 y 9 horas. Lo recomendable es que tomes el hábito de dormir las horas que necesitas. No en vano, has de respetarte y saber dónde están los problemas para descansar en caso de que estos aparezcan, y consultar con un especialista si es necesario.
Dormir es fundamental en nuestro proceso para adelgazar
Entonces... ¿Dormir menos engorda?
Se puede dar la otra cara de la moneda. Si dormimos menos de lo debido, tendremos más apetito y posibilidades de engordar. El riesgo aumenta significativamente cuando dormimos menos de 6 horas. Por lo tanto, dormir engorda solo si duermes poco. Cuando duermes poco tiempo tienes que preocuparte por varios motivos que has de tener en cuenta. En primer lugar, considera que no vas a estar igual de concentrado que en otras condiciones donde el cuerpo se encuentra más y mejor descansado. El segundo problema es que vas a tener un desajuste hormonal que te puede generar varios problemas. No en vano, los desequilibrios en el sueño influyen en tu metabolismo y eso puede ser problemático. Dos son las hormonas que regulan el apetito del metabolismo, la leptina y la grelina. Cuando hay un desajuste, esto provoca más ganas de comer y el consecuente problema. En los últimos años, ha habido una toma de conciencia sobre este problema.
Como vemos, en lo que comemos o en el entrenamiento deportivo no termina nuestra puesta a punto. Es importante tener en cuenta el descanso del cuerpo a la hora de cuidarnos y de progresar en nuestro objetivo de perder peso. Especialmente relevante es, como hemos visto, darnos las horas necesarias para descansar, ya que no hacerlo el tiempo que los estudios confirman que necesitamos.