La cafeína es una sustancia amarga que se encuentra naturalmente en más de 60 plantas, incluyendo:
- Granos de café
- Hojas de té
- Nueces de cola, que se usan para el sabor de las bebidas de cola
- Vainas de cacao, que se utilizan para hacer productos de chocolate
La mayoría de la cafeína que consumen las personas proviene de las bebidas. Las cantidades de cafeína en diferentes bebidas pueden variar mucho, pero generalmente contienen:
- Una taza de café de ocho onzas: 95-200 mg
- Una lata de bebida cola de 12 onzas: 35-45 mg
- Una bebida energética de ocho onzas: 70-100 mg
- Una taza de té de ocho onzas: 14-60 mg
Según la fundación Española del corazón, nos ayuda a estar más alerta y algunos estudios relacionan su consumo con un mejor rendimiento intelectual. Sin embargo, la cafeína también puede elevar la tensión arterial o provocar insomnio.
La cafeína nos ayuda a estar más alerta y algunos estudios relacionan su consumo con un mejor rendimiento intelectual
Qué efectos tiene en nuestro cuerpo?
Podemos ver los efectos de la cafeína en los diferentes sistemas de nuestro organismo:
- Sistema nervioso central: la cafeína actúa como estimulante del sistema nervioso central, nos ayuda sobre todo a estar en estado de alerta, manteniéndonos más despiertos y menos cansados.
- Sistema digestivo y excretor: la cafeína puede provocar acidez o malestar estomacal. No sirve para calmar la sed, ya que actúa como diurético.
- Sistema circulatorio y respiratorio: a las dos horas de la ingesta de cafeína se dan los niveles más altos de esta en sangre, lo que provoca el aumento de la presión arterial.
¿Qué cantidad deberíamos tomar?
Los expertos aconsejan un consumo moderado de unos 300 mg de cafeína al día, lo que equivale a dos tazas de café. Es importante controlar las cantidades de cafeína que consumimos al día, ya que un exceso puede provocar irritabilidad, insomnio, nerviosismo, náuseas…
¿Qué pasa si consumimos demasiada cafeína?
- Sistema nervioso central: en exceso puede provocar dolor de cabeza, y puede empeorar la situación de personas con trastornos del sueño o ansiedad.
- Sistema digestivo y excretor: no se recomienda consumir grandes dosis cuando se va a hacer ejercicio, ya que, como hemos mencionado antes, actúa como diurético y puede ocasionar demasiada pérdida de agua. También puede provocar diarrea y sed excesiva.
- Sistema circulatorio y respiratorio: un exceso de cafeína puede provocar latidos cardíacos irregulares e incluso dificultades para respirar, por lo que se desaconseja su consumo a personas con problemas cardíacos o de hipertensión.
- Sistema esquelético y muscular: en grandes cantidades, la cafeína puede interferir en la absorción y metabolismo del calcio, pudiendo provocar osteoporosis. A nivel muscular, puede provocar espasmos.