El aro, o círculo mágico, es uno de los materiales más utilizados en el método Pilates por su gran versatilidad. De hecho, cada vez se usa más en los gimnasios y ya lo puedes encontrar en muchas tiendas de deporte.
Ocupa poco espacio, apenas pesa y no tiene un gran coste, así que será un buen compañero si quieres dar más variedad a tus ejercicios en casa o cuando viajas.
Hay que tener en cuenta algunas indicaciones antes de empezar
Si te has planteado alguna vez empezar pilates o ya estás en ello, te queremos proponer una serie de ejercicios, no sin antes tener en cuenta algunas indicaciones a la hora de usar esta herramienta tan útil:
- Busca un espacio tranquilo y lo suficientemente amplio para poder tumbarte cómodamente.
- Necesitas una colchoneta (o una manta doblada) y un aro.
- El aro de Pilates no permite una gran amplitud en los movimientos, por tanto, debes concentrarte en localizar la musculatura involucrada en cada ejercicio.
- No hagas rebotes, presiona el aro hasta donde puedas y suelta esa presión lentamente. De hecho, puedes mantener la presión unos segundos antes de soltarla.
- Acompaña cada movimiento con una respiración suave y fluida. Te ayudará a conectar cuerpo y mente y evitarás tensiones innecesarias.
Ahora sí, podemos disponernos a hacer algunos ejercicios de lo más provechosos:
1. Rodar hacia atrás
Colócate con tu espalda erguida, como en la imagen, y mantén esta posición unas respiraciones. Siente como se activan los músculos del abdomen y de la espalda.
Desde la posición anterior, rueda sobre la pelvis hacia atrás y vuelve arriba.
Exhala mientras ruedas y hunde tu ombligo hacia dentro. En este ejercicio debes sentir la activación de abdominales y glúteos.
Repite este movimiento 10 veces.
2. Presión con los brazos
Tumbado, alarga los brazos hacia arriba y realiza suaves presiones. Quieres acercar una mano a la otra.
Acompaña este ejercicio de la respiración. Exhala cuando haces la presión y evita que tu cuello se tense.
Realiza 10 veces este movimiento.
3. Presión con los brazos y abdominales
Eleva las piernas y cuida que la zona lumbar esté bien apoyada.
Presiona el aro como en el ejercicio anterior poniendo ahora más atención a la musculatura abdominal. Con cada presión saca el aire y siente como tu ombligo se hunde.
Evita que se arquee la espalda.
Repite 10 veces.
4. Adductores
En este ejercicio trabajamos los adductores, la cara interna de los muslos.
Coloca el aro entre tus piernas y apriétalo con cada exhalación 10 veces.
5. Elevación del torso
Este ejercicio activará los músculos abdominales de manera más intensa. Si notas tensión en el cuello, puedes mantener la cabeza en el suelo. Si sientes molestias en la zona lumbar, realiza el ejercicio con las piernas en el suelo.
Con cada exhalación eleva el torso y presiona suavemente el aro con las piernas.
Repite 10 veces.