La alimentación juega un papel fundamental en nuestro estado de salud y en numerosas patologías. Todos sabemos que el colesterol está relacionado con una mala alimentación pero corrigiendo estos hábitos en la dieta y tomando alimentos funcionales podemos llegar a reducirlo de forma significativa. Un alimento aliado es la remolacha, una hortaliza capaz de reducir el colesterol malo o LDL.
El colesterol y la alimentación
Cuando abordamos este tema es importante aclarar lo siguiente: no todo el colesterol es malo y no todas las grasas son perjudiciales.
No todo el colesterol resulta perjudicial para la salud, los siguientes valores determinan la naturaleza del colesterol y su riesgo para el organismo:
- Triglicéridos: Es una forma habitual de almacenar grasa en nuestro organismo. El problema es cuando su presencia es excesivamente alta, esto permite que circulen por el torrente sanguíneo y se adhieran a las paredes de las arterias. Un valor elevado de triglicéridos en sangre necesita una reeducación alimentaria, provienen del consumo de grasas y de hidratos de carbono de forma no adecuada.
- Colesterol HDL: El término HDL proviene de unas siglas en inglés que indican que el colesterol es transportado por una lipoproteína de alta densidad. Esto quiere decir que el colesterol es llevado al hígado dónde va a ser metabolizado y excretado en su mayor parte a través de las heces. Se trata del colesterol bueno.
- Colesterol LDL: El término LDL indica que el colesterol es transportado por una lipoproteína de baja densidad. Este colesterol es necesario en unas determinadas proporciones en nuestro organismo ya que forma parte de distintas estructuras, pero cuando hay un exceso circula libremente por la sangre y se adhiere a las paredes de las arterias. Se trata del colesterol malo.
El tratamiento dietético del colesterol requiere una revisión completa de la dieta
La remolacha: un alimento para reducir el colesterol LDL
El tratamiento dietético del colesterol requiere una revisión completa de la dieta y una sustitución de todas las grasas nocivas por grasas saludables. Además de este cambio de hábitos nos podemos beneficiar enormemente de aquellos alimentos que reducen el colesterol malo.
La remolacha ha dado las suficientes evidencias para ser un alimento funcional capaz de reducir los niveles de LDL y mejorar el perfil lipídico de la sangre.
Se consumen sus grandes raíces rojas y es en esta parte de la planta dónde encontramos una composición nutricional verdaderamente terapéutica:
- El conjunto de su composición nutricional permite que el cuerpo aumente el colesterol bueno pero que a la vez disminuya el colesterol malo LDL y los triglicéridos.
- La remolacha roja contiene 2.7 gramos de fibra. La fibra juega un papel fundamental para regular el apetito y para controlar la absorción de las grasas, además de ello, también se ha comprobado que una ingesta adecuada de fibra resulta un factor clave para prevenir enfermedades coronarias.
- Contiene vitaminas del grupo B, concretamente B2, B6, B3 y B9. Las vitaminas de este grupo son especialmente importantes porque actúan para que los nutrientes sean metabolizados adecuadamente. Ingerir vitaminas del grupo B permite que las grasas se metabolicen de manera que no puedan formar sustancias como LDL o triglicéridos.
- Debes tener presente que la remolacha es un alimento muy rico en oxalatos. Si tienes piedras en la vesícula o cálculos renales habla con tu médico antes de incluirla en exceso en tu dieta. Si tus cálculos son de oxalato cálcico, deberás moderar mucho el consumo de esta hortaliza.