En las últimas décadas, especialmente relacionado con los hábitos de vida y la forma de trabajar, la fatiga o cansancio ocular ha pasado a ser un problema frecuente.
Así la aparición de molestias oculares constituye un motivo frecuente en las consultas médicas. El término médico para definir la fatiga ocular es la astenopia. La astenopia es la respuesta del ojo frente al esfuerzo muscular excesivo durante un lago período de tiempo. Se caracteriza por las siguientes manifestaciones:
- Quemazón y escozor en los ojos, enrojecimiento, ojo lloroso y mayor sensibilidad.
- Problemas visuales, es decir, dificultad para enfocar, visión de manchas en el campo visual, vista borrosa, fotofobia(sensibilidad a la luz), etc…
- Otros síntomas que pueden aparecer acompañantes relacionados con este problema incluyen dolor de cabeza, mareos, contractura y dolor cervical, entre otros.
En la mayoría de los casos estos síntomas están relacionados con hábitos inadecuados y exceso de «trabajo ocular».
La astenopia es la respuesta del ojo frente al esfuerzo muscular excesivo
Una vez descartadas otras enfermedades oculares que requieran tratamiento específico o la necesidad de corrección visual con gafas o lentillas, el cuidado de los ojos y la prevención son las medidas principales para evitar que este problema aparezca o para disminuir su intensidad.
Recomendaciones a seguir:
- Optimizar la iluminación del campo visual y del lugar de trabajo habitual.
- Realizar descansos periódicos de la actividad visual ( por ejemplo, cada hora descansar 5-10 minutos). Es recomendable además levantarse del sitio para no mantener la vista fija.
- Mantener los ojos lubricados (parpadeo) para evitar la sequedad.
- Medidas de protección de la pantalla del ordenador (como filtros de pantalla).
- Sentarse adecuadamente y a la distancia y altura adecuadas (medio metro de la pantalla ya a la altura de los ojos).
- Se debe colocar todo el material de trabajo tan cerca de la pantalla como sea posible para minimizar los movimientos de la cabeza y de los ojos y también los cambios de enfoque.
- Realizar una serie de ejercicios oculares sencillos. Estos ejercicios se deben realizar sin gafas ni lentes de contacto, con descansos pequeños y parpadeos entre cada ejercicio.
Ejemplo de ejercicios:
Parpadeos: Observar y sentir 10 parpadeos completos (cerrar, abrir, cerrar….) como si fuera un telón de un teatro que baja y sube.
Movimientos oculares mirando un dedo, sin mover la cabeza. Los movimientos pueden ser:
- Horizontal a la altura de los ojos, seguir el dedo con la mirada de derecha a izquierda y viceversa, descanso, parpadeos.
- Vertical en la línea media de la cara, mirar el dedo moviéndolo hacia el cielo hasta el máximo, parpadeo, luego hacia el suelo, parpadeo, y puede repetirse 1 o 2 veces más.
- Circular: Dibujar con la mirada 3 círculos grandes hacia la derecha y 3 hacia la izquierda, descanso, parpadeos. (Procurar tener el brazo estirado y sin tensión).
Parpadeo fuerte: Contracción máxima de los párpados, apretando los ojos, los puños y todos los músculos de la cara. A continuación abrir al máximo los ojos, puños y estirar la cara abriendo la boca. Repetir 5 veces. A continuación realizar siempre parpadeos rápidos.
Parapadeos rápidos: como aleteos de mariposa rápidos durante 5/7 segundos. Al terminar, cerrar los ojos y dejar unos momentos de escucha.