El desayuno es la comida más importante del día. Tras una larga noche de ayuno nuestro cuerpo necesita reponer energías. Sin embargo, a veces con las prisas nos olvidamos de la importancia que tiene el hábito de desayunar. Hoy vamos a ocuparnos de los beneficios que encierran los desayunos proteicos. ¿Te animas a empezar bien el día?
Por qué nunca debes saltarte el desayuno
Algunas personas piensan que saltándose el desayuno conseguirán perder peso más rápidamente. Este es un error muy común que debería evitarse. De hecho un estudio realizado por la revista The Journal of Nutricion asegura que desayunar bien nos permite evitar picar entre horas a lo largo de la mañana. Lo cual supone una gran ventaja para deshacernos de esos kilos de más.
Un desayuno proteico evita picar entre horas
Uno de los principios básicos de la nutrición deportiva es no saltarse el desayuno. Estas son las consecuencias de no desayunar por las mañanas:
- Falta de energía y somnolencia a lo largo de toda la mañana.
- Aumento de los niveles de glucosa en sangre. Como resultado la concentración de insulina disminuye y tu cuerpo almacena más cantidad de azúcar.
- La sensación de apetito y la ansiedad por comer se disparan.
- Cambios de humor, estrés e irritabilidad.
- El sistema inmunitario se debilita, lo cual implica un organismo más susceptible a las enfermedades.
- Digestiones más lentas y estreñimiento.
- Aumento del riesgo de padecer enfermedades cardiacas como la diabetes, la obesidad, el colesterol y la hipertensión.
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Como habrás podido observar saltarse el desayuno no es ninguna broma. Por este motivo, es importante que prestes especial atención a esta comida del día. Una opción muy interesante son los desayunos proteicos. A continuación, te mostraremos qué son y cómo pueden ayudarte.
Qué son los desayunos proteicos
Los desayunos proteicos son aquellos en el que los alimentos ricos en proteínas cobran un papel protagonista. De hecho, diferentes estudios han demostrado que la proteína en el desayuno tiene grandes beneficios para la salud. Estos son los más destacados:
- Reducen la ansiedad por la comida. Los desayunos proteicos mantienen la sensación de saciedad por más tiempo, reduciendo los pequeños antojos a lo largo del día.
- Durante la mañana cobran relevancia las hormonas que transforman los alimentos en energía. Desayunar proteínas nos ayuda a regenerar la masa muscular.
- Las proteínas son muy beneficiosas para reducir los niveles de colesterol malo, así como la acumulación de grasas en el cuerpo.
- Digestiones mucho menos pesadas, ya que las proteínas favorecen la asimilación de otros alimentos.
- El sistema inmunológico se fortalece y se disminuye el riesgo de padecer enfermedades de tipo cardiaco.
- Permiten la correcta distribución del oxígeno en la sangre.
- Forman parte del proceso en el que se forma la estructura de nuestro ADN.
- Forman y reparan los tejidos de las uñas, los músculos, el pelo y los huesos.
- Regulan el calor corporal.
- Ayudan a eliminar los deshechos del organismo.
- Los niveles de energía se mantienen altos a lo largo de toda la jornada, mejorando así los estados de alerta, concentración y memoria.
- Te sientes mucho más motivado.
Los desayunos proteicos son fuente de energía y vitalidad. Algo de lo que no podemos prescindir hoy día. Lo ideal es no excederse con el consumo de proteínas, ya que estas no se pueden acumular como tales en el organismo, convirtiéndose con el tiempo en grasas.