Hacer ejercicio sabemos que es algo fundamental a muchos niveles y durante toda nuestra vida. Cuando rondamos la trentena de años empezamos a estar en ese momento en el que ya es importante ir mirando por nuestra salud, y eso incluye hacer ejercicio. A cualquier nivel.
Tal y como nos dice el entrenador personal Tim Liu, a partir de los 30 empezamos a perder hasta un 5% de masa muscular en 10 años, lo que se traduce en mayor facilidad para ganar peso, acumular grasa, y los riesgos que derivan de ello, ampliamente conocidos por todos. A nivel de salud y a nivel de cómo nos queremos ver a nosotros mismos.
Un trabajo que agradeceremos en el futuro
Y no, no necesitamos tener unos brazos grandes, o unos abdominales súper marcados, o correr maratones... Pero sí estar en forma porque en el futuro lo vamos a agradecer y mucho, de eso no cabe duda. Un trabajo de largo recorrido del que cogeremos frutos.
Hay algunas señales que nos indican que debemos ponernos manos a la obra, según nos indica Liu, dos las notarás sin necesidad de moverte, para las otras tendrás que ponerte a punto y pasar el 'casting':
- Tu porcentaje de grasa supera el 15% si eres hombre y el 24% si eres mujer
- Te falta energía durante el día para hacer las tareas diarias
- No puedes correr una milla (1,6 kilómetros) sin parar
- No puedes hacer ni una flexión
¿Qué te parecen? Para los que ya gocen de una buena capacidad aeróbica, correr algo más de un kilómetro no va a suponer ningún problema. Aunque no sea corriendo al 100% evidentemente. Si no lo podemos completar a nuestro ritmo, entonces tenemos un problema. Pero no pasa nada, con constancia podremos lograrlo. Y te aseguramos que correr engancha a la que empezamos a ver resultados y sentirnos más fuertes.
Más o menos pasa lo mismo con las flexiones, que también son un indicador de nuestro estado de forma. La fuerza que tengamos en los brazos nos permitirá hacer más o menos flexiones, así como nuestro estado de forma en general. Y si no podemos, también estamos a tiempo. Podemos entrenar sin accesorios y desde casa, para poco a poco ir mejorando nuestra fuerza y nuestra condición física.
Un buen estado físico y hacer deporte de forma habitual, reducirá el porcentaje de grasa de nuestro organismo, que cuanto más alto es más aumenta el riesgo de sufrir ciertos tipos de enfermedades. De la misma forma, cuando más en forma estés, más energía tendrás durante el día para hacer todo lo que toque, y además a nivel psicológico nos sentiremos mucho mejor, seguro.