La lucha para recuperar tu derecho al movimiento continúa. Muchas personas completaron el test de movimiento para estimar su punto de partida, siendo las restricciones de movilidad en los hombros uno de los principales problemas reportados.

No es de extrañar. La vida moderna ha sido especialmente cruel con ellos. Nuestra postura habitual al trabajar, conducir, revisar los mensajes del teléfono o simplemente estar de pie, daña su estructura. Cuando añadimos intensidad (actividad física en el gimnasio) sobre una disfunción de movimiento, empeoramos el problema.

El hombro, más allá del deltoides

Cuando hablamos del hombro muchos piensan en los deltoides, quizá también en los trapecios. Al igual que pasa con los abdominales, los músculos que vemos en el espejo se llevan la fama y la gloria.

Cuando hablamos del hombro muchos piensan en los deltoides, quizá también en los trapecios

Pero estos músculos visibles no servirían de mucho sin todo el apoyo que reciben de innumerables piezas que participan en la articulación más compleja de nuestro cuerpo. Cuando nos olvidamos de los que trabajan en la sombra, pagamos el precio.

Al contrario que otras articulaciones, el hombro tiene poco soporte óseo alrededor. Esto le confiere más libertad de movimiento que cualquier otra articulación. Pero esta libertad tiene un precio: mayor vulnerabilidad. Por algo los hombros se llevan buena parte de las lesiones de gimnasio.

La sujeción y movilidad del hombro dependen del manguito rotador, un conjunto de músculos y tendones que rodean la articulación.

Para entender muchos de los problemas del manguito  rotador, debemos analizar el siguiente eslabón de la cadena. Como vimos en su momento, las articulaciones alternan sus papeles.

Hombro
Hombro

Toda articulación cuyo objetivo principal es movilidad se apoya en otra que ofrece estabilidad. El hombro es una articulación con mucha movilidad,  y requiere para ello una base estable, en este caso la escápula. Casi el 70% de los problemas del manguito rotador están asociados con mala estabilidad escapular

Eso no es todo. La escápula actúa también como transmisor hacia los brazos de la fuerza generada en las piernas y core. Por ejemplo más del 50% de la energía en un saque de tenis se produce en las extremidades inferiores y torso. Lo mismo en movimientos como el push press.

Según cálculos, una reducción del 20% en la transmisión de energía del core a los brazos (a través de la escápula) requiere un 80% más de masa en los hombros para compensar.

Resumen: una escápula inestable reduce el desempeño y expone a los hombros a un estrés mucho mayor.

Para liberar a tus hombros y optimizar su función proponemos un plan de acción con tres elementos: corregir la postura, mejorar la movilidad y garantizar la estabilidad.