La meditación para dormir es una práctica que recomiendan muchos expertos cuando se sufre insomnio. ¿Quieres aprender a relajarte por medio de esta disciplina?
Uno de los grandes problemas de la sociedad actual es que vivimos muy rápido. Todo sucede instantáneamente, en un solo día y todo esto es información que procesa nuestro cerebro.
A menudo esto acaba desembocando en personas con la incapacidad de desconectar de los smartphone y con grandes problemas para conciliar el sueño. De hecho, numerosos terapeutas recomiendan meditar como método de relajación previo al descanso nocturno, pero no todos sabemos cómo hacerlo.
El ritmo de vida que llevamos cada vez es más alto
Es frecuente acudir a libros, vídeos e incluso a personas que actúen como guías en la experiencia de la meditación a diferentes niveles de profundidad. Pero, para empezar, lo primero que debemos hacer es olvidarnos de las pantallas una hora antes de irnos a la cama. Y es que los estudios han demostrado que esto reduce los niveles de melatonina.

Meditación para dormir
Es el momento de realizar ejercicios de autoconcienciación corporal. Existen numerosos métodos, como el de relajación progresiva de Jacobson o el método 5-5-5. Pero lo importante es prestar atención a distintos segmentos corporales un mínimo de tiempo para concentrar toda tu atención o foco en ese miembro. Por ejemplo el cuello.
De esta manera nos daremos cuenta del tono muscular o estado de precontracción inconsciente que presentamos en diferentes zonas, y lo asimétricos que somos tendiendo a tensar más un hemicuerpo que otro. Errores que se pueden corregir con practicas como el método pilates, que también será tu aliado en este deseado objetivo.
Tras ‘viajar’ de una zona a otra se procura tomar conciencia, y que el ‘viaje’ sea cada noche más corto. Llegando antes a la ‘última parada’, la relajación simultánea de todo el cuerpo. Hay personas más dotadas que lo cogen antes y otras más duras que les cuesta más enfocar. Pero dedicándole tiempo a diario, todos podemos conseguirlo.
La respiración es clave
Otros métodos se centran en la respiración como medio para lograr el fin de la relajación corporal. La respiración puede realizarse de manera voluntaria o involuntaria, y a su vez puede ser diafragmática/superior, o intercostal/inferior.
De tal manera que, prestando atención a los tiempos en los que tomamos aire, lo retenemos, y lo soltamos, mantenemos la mente 100% consciente en este proceso. Y no en los problemas cotidianos del día, relajando el cerebro, el órgano más importante en este momento.
Otras escuelas abogan más por la evasión mental en vez de por el control postural. Es decir, nos intentan trasladar mentalmente a lugares relajantes como islas paradisiacas, o montañas despobladas. Cualquier entorno natural vale siempre y cuando nos alejemos (aunque sea solo mentalmente) de las grandes urbes que nos saturan.
A esta saturación se la ha bautizado como infoxicación: intoxicación por exceso de información, que supera la cantidad gestionable por nuestra mente. Un concepto que hace 20 años no existía, pero seguirá en auge dentro de otros 20. Cuantas más herramientas adquiramos para combatirla, mayor calidad de vida tendremos.