Cuando una pareja decide tener un hijo/a, conviene acudir unos meses antes a la consulta del médico o de la matrona para tener en cuenta una serie de medidas preventivas que permitirán que el embarazo se desarrolle de manera más saludable y segura. Pero, ¿qué pasa si no se logra? ¿Cuándo debemos consultar?
No siempre quedarse embarazada es fácil
Consulta del médico o de la matrona:
1.- En esa consulta previa el profesional valorará tu estado de salud y los factores de riesgo tanto de la madre como del padre que pueden complicar el embarazo.
2.- Si tomas alguna medicación el médico debe saberlo antes de la gestación para ajustarla o cambiarla si es necesario ya que determinados fármacos pueden dañar el feto.
3.- Toda mujer fértil debe tener actualizadas las vacunas, con especial atención al tétanos, hepatitis B y triple vírica (paperas, sarampión y rubeola).
4.- Pon especial atención a la hora de comprar la sal y elige los paquetes de “sal yodada”.
5.- Es importante la ingesta de ácido fólico durante el primer mes de gestación. Será el propio profesional sanitario el que te indica la dosis a tomar.
6.- Algunos puestos de trabajo pueden afectar la fertilidad y/o la salud del bebé. Existe la posibilidad legal de solicitar el cambio de puesto de trabajo en determinados trabajos.
7.- Evita el consumo de cigarrillos, alcohol u otros tóxicos como la marihuana o cocaína
8.- En caso de exceso de peso, conviene que lo pierdas antes de quedarte embarazada.
9.- Realiza ejercicio físico de forma regular.
¿Y si el embarazo no llega?
El imaginario popular ha transmitido la idea de que quedarse embarazada es fácil, y no siempre es así. Cuando se ha tomado la decisión de tener un bebé, la aparición de la regla supone un golpe emocional importante en la pareja.
¡No os desaniméis! La especie humana no es tan eficaz a la hora de conseguir un embarazo. En los primeros meses de relaciones desprotegidas sólo 3 de cada 10 parejas que lo intentan lo conseguirán cada mes. Y estas posibilidades van reduciéndose con cada mes que va pasando.
¿Cuánto tiempo debemos intentarlo antes de consultar a un profesional?
Un año de relaciones sexuales desprotegidas y frecuentes sin lograr el embarazo es el plazo que la medicina reproductiva considera suficiente para realizar un estudio de esterilidad a ambos miembros de la pareja. En el caso de la mujer, el estudio se encamina a evaluar la reserva ovárica, las características morfológicas del útero y la permeabilidad de ambas trompas de Falopio.
En el caso del hombre, el estudio se basa en el análisis de una muestra seminal donde se evalúan las características espermáticas (número, aspecto y movilidad) y una capacitación seminal para conocer el total de espermatozoides con capacidad fecundante que presenta la muestra seminal.