En cuanto comienzan las altas temperaturas del verano, el efecto refrescante del aire acondicionado nos brinda una sensación de alivio. Ya sea en el hogar, la oficina o el coche, los aires acondicionados son parte de nuestras vidas, y protagonistas ahora que no dejamos de mirar los termómetros.

El problema surge cuando las personas se acostumbran tanto a su presencia que se vuelven adictas a ellos. Demasiada exposición al frío de los aires acondicionados conlleva efectos secundarios que pueden llegar a ser graves para la salud. Hay determinados efectos secundarios, como los que se exponen a continuación, que convienen tenerse en cuenta.

La piel se vuelve seca

Pasar demasiado tiempo en un ambiente cerrado con aire acondicionado provoca sequedad y picazón en la piel. Esto generalmente ocurre cuando el aire acondicionado no funciona correctamente y los contaminantes comienzan a acumularse en la habitación.

El aire no se reemplaza adecuadamente debido a la avería del aire acondicionado y esos contaminantes se depositan en la piel y provocan los problemas citados.

Ojos secos

Si permaneces en habitaciones con aire acondicionado durante períodos prolongados, puedes sufrir sequedad en los ojos. Los ojos secos conducen a otros problemas, como visión borrosa y picazón en los ojos.

Deshidratación

El aire acondicionado tiende a secar el aire. Las temperaturas más bajas creadas por el aire acondicionado conducen a la eliminación de demasiada humedad de las habitaciones. El mecanismo del aire acondicionado también absorbe la humedad extra de tu cuerpo, lo que definitivamente conduce a la deshidratación.

Problemas relacionados con la respiración

Permanecer en habitaciones con aire acondicionado durante un tiempo prolongado puede provocar problemas respiratorios, especialmente en la nariz y la garganta. Entre los síntomas que pueden surgir están la obstrucción de la nariz, nariz seca, estornudos continuos, secreción nasal e incluso rinitis.

Además, pueden conducir al desarrollo de faringitis y aunque no directamente, el aire acondicionado puede afectar los pulmones y la garganta.

Unidad de aire acondicionado : Pixabay
Unidad de aire acondicionado / Pixabay

Infecciones

Las infecciones relacionadas con la nariz y la membrana mucosa son comunes si abusas del aire acondicionado. Esto generalmente ocurre porque el conducto nasal se seca, lo que facilita la entrada de virus y bacterias que causan infecciones. También se puede contraer una enfermedad llamada legionella debido a peligrosas bacterias presentes en las grandes unidades de aire acondicionado.

Alergias

El mantenimiento frecuente de los aires acondicionados es esencial para evitar el desarrollo de alergias. A veces, los aires acondicionados defectuosos pueden incluso provocar asma. Hoy en día los aires acondicionados cuentan con una tecnología que reduce los alérgenos presentes en el aire. Desafortunadamente, un aire acondicionado defectuoso no brinda esa función. Por lo que se recomienda el mantenimiento mensual de aires acondicionados, sobre todo, en las empresas.

Náuseas y dolores de cabeza

La deshidratación causada por el aire acondicionado puede provocar náuseas, dolores de cabeza e incluso migrañas. Todos sabemos cómo la deshidratación desencadena migrañas y dolores de cabeza. Esto generalmente ocurre cuando sales repentinamente después de permanecer en un entorno de climatización durante mucho tiempo. El cambio repentino de temperatura no es fácilmente aceptado por nuestro cuerpo y esto conduce al desarrollo de dolores de cabeza y náuseas.