No hay que esperar a que llegue el calor. Es recomendable preparar antes rostro y piel por dentro y por fuera para minimizar los posibles daños ocasionados por el exceso de sol y evitar la aparición de manchas, arrugas y erupciones. ¿Cómo y cuándo empezamos? ¡Desde ya!
Se debe limpiar el rostro cada día, mañana y noche: este paso es fundamental y se debe hacer por la mañana y por la noche para ayudar a eliminar las toxinas, las impurezas y el maquillaje (en caso de maquillarse). La base limpiadora debe ser suave, que no irrite, y con principios activos naturales.
Realizar un peeling una vez a la semana: así se eliminará la capa de las células muertas y se favorecerá la renovación celular. Sería recomendable escoger exfoliantes naturales elaborados con fibras vegetales de algas o lufa, con extractos de bambú o granos de azúcar, por ejemplo.
No podemos olvidarnos de cuidar la piel por dentro
Pero no podemos olvidarnos de cuidar la piel por dentro, con la alimentación y una suplementación nutricional correcta. Estas son algunas recomendaciones:
- Dieta rica en verduras de todos los colores: tener en cuenta todos los colores del mundo de los vegetales asegura una buena fuente de antioxidantes que ayudarán a proteger la piel por dentro.
- Grasas saludables en la dieta: por lo tanto, aceites de primera presión en frío de semillas y frutos secos: girasol, sésamo, nueces, lino, etc. o comer semillas oleaginosas y frutos secos.
- Germinados: incluir en comida y cena germinados de alfalfa, de rabanitos, de brócoli, etc., aporta muchos nutrientes.
- Buena hidratación: agua, zumos de fruta y hortalizas naturales e infusiones. Así se logra una piel bien hidratada y se evita que se reseque.
Tanto si se tiene una piel blanca y delicada como si gusta tomar el sol, es conveniente tomar dos meses antes de la época de calor un suplemento alimenticio de betacaroteno natural.
Para mantener la flexibilidad, la hidratación y lograr una piel lisa y muy nutrida es interesante tomar, tanto los meses antes como después de la exposición al sol, un suplemento alimenticio que aporte una mezcla de ingredientes activos que potencien la acción regeneradora de la piel: colágeno y ácido hialurónico, para ayudar a mantener una piel estirada, flexible e hidratada y contribuir a que el proceso de envejecimiento de la piel sea más lento; vitamina C y vitamina E, por su efecto antioxidante.