Entre los muchos motivos por los cuáles la gente se inscribe en un gimnasio está el que su apariencia física no les agrade y quieran verse mejor. Especialmente de cara a los meses más calurosos del año, cuando solemos llevar menos ropa. Pero un beneficio adicional, es que podemos mejorar nuestra salud y sentirnos mejor y con más energía. Si eres nuevo en esto de las mancuernas y de los entrenamientos de fuerza, deberías ir al gimnasio solo tres veces por semana durante los primeros dos o tres meses, no hay mejor camino al fracaso que asistir todos los días.

Alimentación, la base para aumentar la motivación

La alimentación es la base cuando estamos queriendo ver cambios en nuestro cuerpo. Cualquiera puede entrenar duro por una hora y media 3 o 4 veces por semana. La alimentación significa hasta un 80% de los resultados que observes en lo referente a obtener tono muscular, fuerza, hipertrofia o pérdida de grasa. Así que no la podemos olvidar, sino estaremos tirando nuestras energías y nuestro tiempo a la basura.

Eventualmente tendrás que estar dispuesto a comer 5 veces al día, y olvidarte de los hábitos alimenticios que la gente “normal” sigue. Si no estás dispuesto a seguir un régimen alimenticio, olvídate de obtener resultados en forma rápida, dado que gran parte del trabajo que hagas no tendrá efecto. Sin embargo, las buenas noticias son que con la motivación, también solemos regular lo que comemos, y es una rueda recíproca de la que saldremos muy beneficiados.

Las pesas, una cuestión de rutina

Ningún suplemento por si solo  te ayudará a ganar masa muscular o perder grasa si no está ligado a un programa de entrenamiento y nutrición bien diseñado. Si te alimentas adecuadamente, entonces podrás pensar en incluir un buen complemento en otro caso es tirar el dinero.

Como decimos, si eres nuevo o nueva en esto de ir al gimnasio, hay algunos pasos a seguir que te pueden venir bien:

  • Elige la rutina correcta: Si acabas de empezar, no le des más vueltas: Full Body 3 días por semana. Esta rutina tiene muchas ventajas, entre las que destacan la alta frecuencia del mismo músculo que entrenas en semana, creando rápidas adaptaciones, y sobretodo, mejorando antes la técnica por la alta frecuencia.
  • Haz los ejercicios correctamente: Antes que nada, no hagas ningún ejercicio si no sabes como es la técnica adecuada o no tienes suficiente flexibilidad para realizarlo. Pregunta, investiga, y evita riesgos.
  • Empieza ya: Lo de ir posponiendo el día de empezar a entrenar, no solo no funciona, si no que en la mayoría de los casos acabas por ni empezar, y te puedes arrepentir toda tu vida. Un círculo en el que no queremos entrar, que a largo plazo solo conduce a la decepción personal.