Desde comienzos de 2019, las calles de numerosas ciudades españolas se fueron llenando cada vez más de gente, sobre todo joven, que protestaba contra la inoperancia de los gobiernos ante los devastadores efectos del cambio climático.
Estas concentraciones fueron el punto de partida del movimiento internacional 'Fridays for Future' en nuestro país. Dicho movimiento, que se sigue en más de 20 países, comenzó en agosto de 2018, después de que la joven estudiante Greta Thunberg decidiera plantarse delante del parlamento sueco todos los días para protestar contra la falta de respuesta política contra el cambio climático.
Thunberg compartía sus acciones por redes sociales, y la difusión comenzó a aumentar. Entonces, el 8 septiembre, la joven cambió de estrategia y decidió que, a partir de ese momento, protestaría todos los viernes de cada semana, haciendo huelga estudiantil y plantándose delante del parlamento sueco. Aunque sí el más conocido, 'Fridays for Future' no es el único elemento de origen sueco que se ha extendido a nivel internacional y que busca preservar el medioambiente de nuestro planeta. Si sois fans del running y vuestro objetivo es preservar el medio ambiente, estáis de enhorabuena, porque podéis cumplir ambas a la vez gracias al 'plogging'.
El 'plogging' es muy sencillo. Consiste, básicamente, en recoger basura mientras corres
El 'plogging', la forma rápida (y nunca mejor dicho) de acabar con la basura El 'plogging' es muy sencillo. Consiste, básicamente, en recoger basura mientras corres. El término proviene de la palabra sueca 'plocka upp', que significa recoger, y el vocablo inglés 'jogging', salir a correr. Se trata de una forma ecológica de hacer ejercicio que está arrasando en todo el mundo.
Fue inventado por el sueco Erik Ahlström en 2016. Aquel año se mudó del resort Åre a Estocolmo, donde quedó muy impactado por la cantidad de residuos que veía acumulados en las calles cada vez que utilizaba la bicicleta para ir a trabajar: "La misma basura podía estar en la calle por varias semanas sin que nadie la recogiera, así que yo empecé a hacerlo. Mi corazón se sentía bien aunque sólo limpiase un pequeño espacio de la ciudad", comenta cuando explica cómo surgió la idea.
Desde entonces, Ahlström adquirió el hábito de recoger basura mientras montaba en bicicleta. Poco a poco, comenzó a organizar eventos con amigos y personas aficionadas al running para salir a correr y limpiar las calles de la ciudad. Según él mismo, "cuando haces una actividad física, aumentas tu adrenalina y segregas endorfinas, por lo que el 'plogging' se convierte en una especie de caza del tesoro".
El éxito fue rotundo. Poco a poco esta actividad, conocida en sueco como 'plogga', comenzó a extenderse por todo el país. Tanto fue así, que Ahlström creó una página web donde se ofrecía información acerca de los eventos organizados, así como de las consecuencias del cambio climático. Además, el término 'plogga' fue una de las 38 palabras nuevas que se admitieron en la lengua sueca.
En un mundo globalizado, donde las redes sociales permiten establecer conexiones entre personas de distintos países, era cuestión de tiempo que el 'plogging' se extendiera más allá de Suecia.