Como más personas empiezan a darse cuenta los increíbles beneficios que la vitamina D tiene para ofrecer, más personas naturalmente la empiezan a consumir más, igualmente a través de suplementos o tomando sol. El lado negativo de este aumento de su consumo, sin embargo, es que más personas están teniendo reacciones adversas de la vitamina D. Lo que la mayoría de la gente no esta enterada, es que la mayoría de estos llamados “efectos colaterales de la vitamina D” no son problemas causados por la ingesta de la vitamina por si misma, sino que realmente son problemas causados por no consumir suficientemente magnesio.
La vitamina D, igual que los demás nutrientes, trabaja en armonía con varios otros nutrientes para ejercer sus múltiples funciones. Lo más importante es que la vitamina D requiere y utiliza magnesio para convertirse del suplemento o del sol a su forma activa en la sangre. Como vemos, es un gran error simplemente tomar grandes dosis de vitamina D sin tomar el magnesio necesario. Esto es exactamente lo que ocurre en la mayoría de los casos y esta causando que mucha gente tenga problemas que ellos creen son debidos a los efectos colaterales de la vitamina D, como insomnio, dolor de cabeza, nerviosismo, calambres musculares, ansiedad, palpitaciones o constipación.
La vitamina D trabaja en armonía con varios otros nutrientes para ejercer sus múltiples funciones
Como un gran número de personas tienen una sutil deficiencia de magnesio se tendrá esta deficiencia amplificada cuando se empiece a tomar vitamina D.
Mientras haya personas que por alguna u otra razón simplemente no pueden tolerar consumir suplementos de vitamina D, la buena noticia es que la vasta mayoría de estos problemas pueden ser prevenidos e inclusive revertidos obteniendo clínicamente significantes cantidades de magnesio.
A diferencia de las sustancias médicas, los nutrientes están interconectados entre si y rara vez alguna persona tiene solo deficiencia de un nutriente completamente solo. En particular, la necesidad de suficiente magnesio es crucial para evitar algunas de los incómodos problemas que frecuentemente en forma falsa se le atribuye a los efectos colaterales de la vitamina D o a una sobredosis de la misma.