Hace años que la ciencia conoce que determinadas vitaminas están a nuestro favor para combatir la inflamación. Su consumo puede realizarse bien a través de los alimentos que la contienen de manera natural o mediante los suplementos existentes en el mercado.

A continuación ofrecemos una lista de vitaminas que cuentan con propiedades antiinflamatorias y los alimentos que son fuentes ricas en ellas.

  • Vitamina A

La vitamina A puede evitar que el sistema inmunitario sea hiperactivo y cause inflamación. Está disponible en dos formas: el betacaroteno es una provitamina que se convierte en vitamina A en el cuerpo y la vitamina A es un antioxidante que protege al cuerpo contra los radicales libres.

Los alimentos ricos en vitamina A incluyen las zanahorias, el diente de león, la col rizada, las espinacas y una amplia variedad de verduras de hoja.

  • Vitaminas B

Las personas con niveles bajos de vitamina B6 suelen tener altos niveles de proteína C reactiva, otro compuesto responsable de la inflamación, especialmente en enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide.

Para reducir la inflamación y aumentar la vitamina B6, trata de consumir alimentos ricos en vitamina B, como la col rizada, los pimientos, los champiñones, el melón, el atún y las aves de corral.

Además, dosis bajas de suplementos de ácido fólico (también conocido como folato, otra vitamina B) tomadas diariamente y por períodos cortos pueden reducir la inflamación.

Las fuentes alimenticias de folato incluyen los guisantes de ojos negros, las verduras de hojas verdes oscuras, los espárragos y el hígado.

Espárragos verdes / Pixabay
  • Vitamina C

La vitamina C es conocida por ayudar a mantener el sistema inmunológico saludable y en buen funcionamiento. Además, la vitamina C puede eliminar los radicales libres responsables de causar inflamación.

La vitamina C, como las vitaminas B, también puede ayudar a reducir la proteína C reactiva. Los suplementos son útiles, pero siempre es mejor tratar de obtener vitamina C de la dieta a través de frutas y verduras, que también están cargadas de antioxidantes.

  • Vitamina D

Los niveles de vitamina D baja están relacionados a una variedad de enfermedades inflamatorias. Además, incrementar la ingesta de vitamina D puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Las personas con bajos niveles de vitamina D pueden beneficiarse de la suplementación con vitamina D7.

La vitamina D es producida naturalmente por el cuerpo después de la exposición al sol, pero no todos pueden obtener toda su vitamina D de esta manera. Las mejores fuentes alimenticias de vitamina D son el pescado, las yemas de huevo, las vísceras y los alimentos suplementados con vitamina D, incluida la leche.

  • Vitamina E

La vitamina E es otra vitamina antioxidante, lo que significa que puede reducir la inflamación. La vitamina E se encuentra naturalmente en nueces y semillas, incluidas las almendras y las semillas de girasol. Muchas frutas y verduras también son ricas en vitamina E, como el aguacate y las espinacas.

  • Vitamina K

La vitamina K puede reducir los marcadores inflamatorios, ayudar con la coagulación de la sangre y proteger la salud de los huesos. Y aunque la vitamina K es necesaria para los huesos, la mayoría de las personas no la obtiene en cantidad suficiente mediante sus dietas.

Hay dos tipos de vitamina K: vitamina K1 y K2. La vitamina K1 se encuentra en las verduras de hoja, como la col rizada, las espinacas, el brócoli y el repollo, mientras que la K2 se encuentra en el pollo, el hígado y los huevos.