La práctica del yoga posee numerosos beneficios para toda la población, independientemente de su edad; esto vale también para los más pequeños. Es por ello por lo que queremos ofrecerte a continuación un listado de las mejores posturas de yoga para niños que pueden conferirles todos los beneficios de esta actividad ya desde una edad temprana. Como pauta general, hay que indicar que en su caso es recomendable realizar estas actividades durante 10 o 15 minutos. Igualmente, y como consejo previo, siempre deben practicarse ejercicios de respiración empleando diferentes técnicas de respiración.
La práctica del yoga posee numerosos beneficios
1 - El arquero
Esta postura es ideal para mejorar su equilibrio así como para el fortalecimiento de piernas y brazos. Es una posición que, al mismo tiempo, aporta una gran fortaleza interior y tiene propiedades beneficiosas a la hora de relajar todo el organismo. Para realizarla, seguiremos los siguientes pasos:
- En primer lugar, estiraremos la pierna derecha, llevándola hacia delante. Posteriormente, doblaremos la rodilla, llevándola por delante de nuestro pie.
- En segundo término, debemos cerrar el puño derecho y llevaremos el pulgar hacia arriba. Seguidamente, estiraremos el brazo derecho, manteniéndolo en paralelo al suelo.
- Nuestro brazo izquierdo lo llevaremos hacia atrás. Entonces, respiraremos inhalando y exhalando de forma profunda. Nos mantendremos en esta postura entre 5 y 10 segundos.
- Volveremos a la posición inicial para descansar, y posteriormente repetiremos el ejercicio con el otro lado. En total, debemos repetirlo tres veces.
2 - El árbol
Es una de las mejores posturas de yoga para niños gracias a su sencillez y sus beneficios. De nuevo, sirve para trabajar las piernas y su equilibrio. Para realizarla, debemos hacer lo siguiente:
- Nos colocamos de pie, con nuestras piernas juntas y con nuestros brazos extendidos.
- Cuando tengamos esta posición, flexionamos la pierna derecha y la apoyaremos sobre nuestro muslo izquierdo.
- En este punto, debemos inhalar y exhalar profundamente. Entonces, bajaremos la pierna derecha al suelo y descansaremos.
- En este punto, debemos repetir la postura, esta vez con la pierna contraria. Este ejercicio lo repetiremos un total de dos veces con cada extremidad, respetando con cada una el tiempo de descanso.
3 - El gato
Esta tiene la ventaja de ser una postura muy divertida para los más pequeños: exactamente igual que cualquiera de las que imita la postura de los animales. Tiene beneficios en su columna vertebral, su postura y sus brazos. Para hacerla, seguiremos los siguientes pasos:
- Hay que colocarse en el suelo, a cuatro patas.
- Posteriormente, inspiraremos llevando arriba nuestra cabeza y arqueando la espalda. En el momento que exhalemos, debemos buscar que nuestra espalda se redondee, llevando nuestro mentón contra el pecho y haciendo presión con las manos sobre el suelo.
- Este ejercicio debe repetirse entre tres y cinco veces, descansando después de cada repetición.
4 - La montaña
Es sencilla y, por lo mismo, otra de las mejores posturas de yoga para niños. También hay que decir que tiene numerosos beneficios que van desde el fortalecimiento de la columna hasta la mejor de la oxigenación y beneficios sobre la digestión. Es también una muy buena postura para obtener relajación. Se hace siguiendo los siguientes pasos:
- Nos colocaremos sentados sobre nuestras piernas, con ellas cruzadas y siempre con nuestra espalda recta. En nuestro pecho, juntaremos las palmas de nuestras manos.
- Poco a poco iremos llevando las manos por encima de nuestra cabeza, acompañando el movimiento con la respiración mientras estiramos los brazos hacia arriba.
- Debemos aguantar en esta posición un tiempo de entre cinco o diez segundos.
- Por último, vamos a bajar nuestras manos poco a poco, despacio. Al finalizar, repetiremos el ejercicio entre tres y cinco veces, siempre descansando entre una repetición y otra.
5 - Estiramiento con mudra de mariposa
Queremos incluir entre las mejores posturas de yoga para niños una que sirve para estirar. La mudra de mariposa ayuda a aliviar las tensiones en diferentes zonas del cuerpo, que van desde el torso hasta los hombros pasando por las cervicales. Para hacerla, seguimos estos pasos:
- Nos colocaremos de pie, con nuestras piernas separadas a la altura de las caderas.
- Juntaremos nuestros dedos pulgares, entrelazándolos y elevando las manos por encima de nuestra cabeza, llevándolos hacia arriba.
- Iremos curvándonos hacia atrás, hasta donde nos permita la postura.
- Exhalaremos el aire, bajando al mismo tiempo las manos.
- Una vez que hayamos llegado abajo, volveremos a la posición inicial, despacio y en orden, siendo la cabeza la última parte en volver arriba. Debemos repetir tres veces, descansando entre las repeticiones.