Talento, innovación y compromiso. Son los tres pilares básicos de Aigües de Barcelona para servir a la ciudadanía y hacer frente a los retos derivados del cambio climático. El conocimiento y la tecnología son la punta de lanza para el desarrollo de ciudades inteligentes, resilientes y verdes. La clave para garantizar un desarrollo sostenible e inclusivo que no deje a nadie atrás.
Reflexionar sobre el valor del agua es el objetivo de Naciones Unidas con motivo del Día Mundial del Agua, que se celebra el 22 de marzo. El agua, un bien esencial y escaso, tiene muchos significados. Para Aigües de Barcelona, es su razón de ser y el motivo que los impulsa cada día a mejorar. El agua es progreso y futuro.
El objetivo de Aigües de Barcelona es aportar valor a la ciudad a partir del vector agua y contribuir de forma significativa al desarrollo sostenible de todo el entorno metropolitano, comprometidos en el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas. Fomentar el espíritu innovador y el talento es la mejor estrategia para que Barcelona y toda su área metropolitana se consolide como un hub mundial del agua, un referente en la mitigación y adaptación al cambio climático y sus efectos.
Un modelo de éxito
Aigües de Barcelona trabaja en un ecosistema de innovación abierta en el que colabora con un total de 142 partners para afrontar los retos sociales y medioambientales, y para generar valor económico y social en el territorio. Fruto de ello son iniciativas como Start4Big (junto con CaixaBank, Naturgy, Seat y Telefónica) para atraer talento emprendedor nacional e internacional; Tech4Climate (con la Fundación Ship2B, Fundación Repsol, Innocells y Nestlé España), que busca las mejores start-ups con el foco en la sostenibilidad y el medio ambiente, o IND+I, un espacio de intercambio de conocimiento sobre innovación e industria que organiza el Ayuntamiento de Viladecans, con el apoyo de la Generalitat, Incasòl, DeltaBCN, la Diputación de Barcelona y el Área Metropolitana de Barcelona.
También participan en el Programa de Doctorados Industriales, una estrategia del Gobierno de la Generalitat cuyo objetivo es la transferencia de conocimiento entre los entornos empresariales y académicos, que contribuye a la competitividad del tejido industrial catalán a la vez que fomenta la formación y genera ocupación de calidad.
Los proyectos de investigación e innovación se materializan en buena medida a través de Cetaqua, el centro tecnológico del agua creado en 2007 por Aigües de Barcelona, la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Un modelo de colaboración público-privada donde se utilizan al máximo las capacidades internas y se colabora con la comunidad científica e innovadora, lo que les permite estar a la vanguardia de las nuevas tendencias.
Ecofactorías para una economía circular
Aigües de Barcelona aplica la innovación para reutilizar todos los recursos y hacer frente al estrés hídrico que sufre la cuenca del Mediterráneo. Han transformado la depuradora del Baix Llobregat en una ‘ecofactoría’, una verdadera fábrica autosuficiente que genera toda la energía que necesita, regenera el agua y valoriza todos los residuos.
El concepto de ‘ecofactoría’ va más allá del ciclo urbano del agua. Prueba de ello es el proyecto LIFE NIMBUS, impulsado en colaboración con Cetaqua, TMB, LABAQUA y la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), que permite transformar en biometano el biogás que se genera en las estaciones depuradoras y utilizar este combustible verde en autobuses metropolitanos.
La innovación permite también estar al lado de los que más lo necesitan. Como el proyecto que, en colaboración con los servicios sociales de los ayuntamientos, basándose en los datos de telemedida del consumo de agua, permitirá detectar cambios de comportamiento en las personas que necesitan asistencia y generar una alerta para determinar si hay que hacer un seguimiento.
Pacto Social para una recuperación verde y justa
Las alianzas con el entorno son imprescindibles en todos los proyectos. Por eso, han propuesto un gran Pacto Social para dar respuesta a los retos derivados de la pandemia y garantizar una recuperación económica verde y justa. Un pacto en el que se comprometen a no dejar a nadie atrás, generar ocupación de calidad e impulsar una reconstrucción bajo el eje de la sostenibilidad.
La compañía no deja sin agua a nadie que no pueda pagar el servicio por razones económicas gracias a la innovación social, que supuso en su día la creación de su Fondo de Solidaridad. Ahora, han dado un paso adelante con una nueva tarifa social para bonificar 300 litros de agua diarios a los 60.000 hogares del área metropolitana en riesgo de exclusión social que tengan a todos sus miembros en paro, que estén en situación de pobreza energética o que reciban una pensión mínima.
Innovación también para preservar la salud. Aigües de Barcelona ha desarrollado COVID-19 City Sentinel, un instrumento que monitoriza las aguas residuales y detecta y cuantifica la presencia del virus SARS-CoV-2. Esta pionera solución, fruto de coordinar los esfuerzos de numerosos centros de investigación e innovación, combina un plan de muestreo, análisis rápidos y el acceso a un observatorio digital. Se trata de una pieza clave para anticipar escenarios y tomar decisiones que pueden salvar vidas. Un ejemplo de cómo la ciencia, unida al conocimiento experto, es la mejor vía para proteger la salud pública.
El agua es futuro. Y cada día ese futuro se construye trabajando codo con codo con la comunidad científica y los agentes que impulsan la innovación, en alianza con administraciones y entidades sociales. El compromiso con la acción social y la innovación está en el ADN de Aigües de Barcelona para dar respuesta a los retos de las personas, de la ciudad y del medio ambiente.