¿Qué es más caro, medio kilo de mongeta tendra (judías verdes), medio kilo de bajoques o medio kilo de fesolets? Técnicamente tiene que valer lo mismo en todas partes, ya que las tres cosas son el mismo producto pero llamado de maneras distintas. Aquello que para alguien de Badalona se llama de una manera, para una persona de Reus o de Vilanova i la Geltrú tiene otro nombre, al igual que pasa con decenas de frutas, verduras, productos cárnicos o variedades de embutidos por todo el país. Por lo tanto, tan absurdo es preguntarse si es más rico en hidratos de carbono un kilo de patates (patatas) o un kilo de trumfos como encontrarse pastanagues (zanahorias) etiquetadas como tal en los supermercados de Figueres, donde todo el mundo las conoce como carrotes, o en las tiendas de La Sénia, donde todo cristo dice safanòries.

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¿Tomates, tomaques, tomàquets o tomacons? (Pixabay)

Alimentar el catalán, alimentar de riqueza la lengua

En Catalunya tenemos una lengua tan rica como nuestra fruta y verdura, por eso el grupo Bon Preu ha tirado en los últimos días una iniciativa que fusiona la apuesta fiel y permanente de Bon Preu hacia el producto nacional de km.0 y la riqueza lingüística para llamar de tantas maneras como sea posible la gran variedad de alimentos producidos en nuestro país. "Alimenta el català" es el nombre de la campaña, basada a recuperar las diferentes variedades dialectales de todo tipo de productos, desde los frescos y de temporada hasta los pescados, los envasados o, incluso, las bebidas. El objetivo es simple y concreto: reforzar la sensibilidad hacia las variedades dialectales del territorio, así como generar una importante proximidad emocional.

Bon Preu Alimenta el catalán

Si estuvieran vivos, sin duda Francesc de Borja Moll y Joan Coromines irían a hacer la compra al Bonpreu o Esclat más próximo a su casa, ya que pocas cosas harían más feliz a dos filólogos amantes de la dialectología como ellos que la posibilidad de llenar el carro y agrandar la riqueza lingüística al mismo tiempo. Por una parte, la campaña de redes sociales anima a los seguidores de la cuenta de supermercados Bonpreu i Esclat a compartir las variedades léxicas de determinados productos de su zona geográfica, aumentando la diversidad dialectal de los productos de nuestra casa en formato concurso: a los diversos perfiles de Bon Preu en las redes sociales, la empresa presenta diferentes productos frescos característicos de Catalunya y pregunta a los clientes que escriban un comentario afirmando con qué nombre los denominan, sorteando entre todos los participantes varios premios.

Por lo que a los establecimientos Bonpreu y Esclat se refiere, "Alimenta en català" también se están aplicando progresivamente estas variedades dialectales en las etiquetas de los productos donde consta el precio, así como en los tickets de compra. De esta manera, podremos comprar una lata de berberechos o una lata de catxels, en caso de que nos encontremos en un supermercado de Palamós, por ejemplo. Para llevar a cabo esta campaña tan especial, Bon Preu cuenta con la colaboración del Consorcio para la Normalización Lingüística (CPNL), encargado de contribuir al asesoramiento y correcta aplicación de las correspondientes variedades dialectales: un equipo de técnicos profesionales revisan y validan semanalmente los términos dialectales propuestos, dotando la acción del rigor lingüístico necesario durante las cuatro semanas en qué tendrá lugar la campaña.

Bonpreu interior foto

Bon Preu, un compromiso latente con el país

La campaña no tendría que sorprender a nadie que conozca mínimamente el Grupo Bon Preu, ya que más allá de ser una empresa referente en el sector de la alimentación, la compañía es una organización comprometida con los ciudadanos y con el territorio. Con una actividad orientada al mercado catalán, Bon Preu trabaja con el anhelo de ofrecer el mejor servicio, precio y calidad de producto a los clientes, trabajando con proveedores locales y de km 0 y comprometidos con la sostenibilidad y medio ambiente. Actualmente cuenta con más de 131 supermercados Bonpreu; 56 hipermercados Esclat; 19 centros de recogida de la compra en BonpreuEsclat Online y sistema logístico de entregas a domicilio en 38 poblaciones de Catalunya. Además, claro está, 55 gasolineras EsclatOil, 12 minimercados y, más recientemente, la puesta en marcha de la comercializadora eléctrica BonpreuEsclat Energía.