Existe mucho desconocimiento todavía sobre las mil y una posibilidades que tenemos en la cama. Ignorancia que, a menudo, se ve impuesta por unos tabúes que la sociedad todavía tiene muy presentes: si te gusta el sexo eres un pervertido y si te gusta probar cosas nuevas eres una viciosa, tengas lo que tengas entre las piernas. Pero estas ideas preconcebidas, por inofensivas que puedan parecer, pueden limitarnos un montón a la hora de darle rienda suelta a nuestra imaginación.
Tradicionalmente, cuando pensamos en posturas sexuales pensamos en el Kamasutra, ese conocido y antiguo texto hinduista que trata sobre el comportamiento sexual humano y que, originalmente, ofrece un total de 64 posiciones sexuales. Aunque el mundo de las posturas no puede limitarse a ninguna cifra en concreto, es una guía fantástica para liberar nuestro cuerpo y hacer lo que nos plazca. Y es que la mejor manera de innovar en la cama es buscar inspiración ajena: tenemos suerte de vivir en la era de la Información y de la diversidad sexual, porque hoy en día tenemos un montón de contenidos relacionados con la educación sexual a golpe de clic.
Desmontando monotonías y tópicos
Pensar que nunca viviremos un episodio de monotonía en la cama es algo atrevido: casi nadie está exento de tener una época con menos ideas – o menos libido. El trabajo, las preocupaciones o la conformidad de saber que estamos en los brazos adecuados pueden ser nuestros peores aliados a la hora de prestarle atención al sexo. Y al final, pasa lo que pasa: que por mucho que queramos innovar, la realidad es que acabamos haciendo lo mismo.
Uno de los ejemplos típicos (y míticos) es el de la postura de las “tijeras” que icónicamente representa el sexo lésbico. Siempre se ha dado la imagen de que no hay postura más satisfactoria para las personas con vagina, pero ellas no piensan lo mismo: la gran mayoría confirma que no es la mejor para tener sexo entre ellas. Pasa lo mismo entre personas con pene, que ven como su intimidad es constantemente cuestionada por ser limitada en cuanto a posiciones – todo se acaba en tener un rol activo o pasivo. Vaya, que no solo se trata de romper el mito, sino de darse cuenta que existen un montón de opciones para darnos placer, sin caer en las tradiciones socialmente impuestas desde tiempos inmemoriales.
Kamasutra: ¡para gustos, los colores!
Saliendo del Kamasutra original, se pueden practicar un sinfín de posturas; de hecho, existen cientos de combinaciones y posibilidades, tantas como permita la imaginación de cada uno. No hace falta etiquetarlas ni ponerles nombre mientras las hagamos con responsabilidad y afecto, aunque también es cierto que, a veces, necesitamos un empujón para empezar a probar cosas nuevas. Pero en la era digital, lo tenemos fácil: solo necesitamos abrir el ordenador o el móvil y buscar aquello que necesitamos saber. ¡Ay, si nuestros abuelos hubieran tenido 5G!
Y es que de haber sido así, seguro que habrían sido fanáticos de la tienda online de productos eróticos Diversual, el lugar perfecto para aprender cualquier cosa sobre nuestra sexualidad. Salir de la rutina para iniciarse en nuevas prácticas, añadir juego y diversión a nuestras experiencias en la cama pero, sobre todo y quizás lo más importante, un sitio donde inspirarte sin dejar de lado el cuidado de tu espacio íntimo. Porque para innovar en posturas es crucial potenciar nuestra autoestima y seguridad sexual.
¡Y ya podemos empezar a descubrir nuevas sensaciones! Para complementar y añadir placer a cualquier postura añadir juguetes eróticos es una buena opción, porque potencian el placer y permiten que el clímax aumente en un tanto por ciento considerable. Es importante también no limitarnos y pensar que cada postura sexual puede practicarse con un tipo de relación. ¡Porque para nada! Cualquier posición se puede adaptar a cualquier pareja mientras haya comunicación entre ambas parte.
La Academia Erótica de Diversual pone especial énfasis en naturalizar el sexo y acercarlo a cualquier cuerpo o identidad, también en lo que a posturas se refiere. Dispone de un Kamasutra ilustrado, un Kamasutra lésbico y un Kamasutra gay, una selección muy completa sobre cuáles son las posturas más placenteras para disfrutar en pareja. Su objetivo es claro: que nadie se sienta huérfano de educación sexual. Y es que el amor – y el sexo – no entienden de leyes ni de fronteras.