Josep Maria Subirachs (Barcelona, 1927-2014) es un referente internacional de la escultura catalana de posguerra. Pero su obra eatá poco presente en los museos de Catalunya. Es por eso que la Fundació Vila Casas quiere reivindicar su figura con la exposición Subirachs. De l’expressionisme a l’abstracció (1953 - 1965), que se podrá ver en Can Mario (Palafrugell) hasta el 27 de noviembre. Y es que esta es la primera obra que se le dedica en Catalunya a Subirachs desde el 2001.
La Fundació Vila Casas quiere reivindicar la figura de Josep Maria Subirachs
"Teniendo en cuenta la escasísima presencia de Subirachs en nuestros museos nacionales, esta exposición es una reivindicación en toda regla, porque estamos convencidos de que Subirachs es uno de los mayores escultores catalanes de la segunda mitad del siglo XX. Para nosotros esta exposición, que se concentra en uno de los periodos más creativos de su obra, es la antesala de la gran retrospectiva que la Fundació Vila Casas quiere dedicarle en 2027 con motivo del centenario de su nacimiento", explica Àlex Susanna, director de arte de la Fundació Vila Casas.
La Fundació Vila Casas quiere dar a conocer a este artista de trayectoria prolífica y dilatada, que ocupa un lugar de referencia como escultor de la generación de posguerra y de quien son indiscutibles sus innovadoras aportaciones a la historia del arte de la segunda mitad del siglo xx. Así pues, hasta el 27 de noviembre, se puede visitar la exposición dedicada a su obra en Can Mario (Palafrugell).
Comisariada por Ricard Mas y Judit Subirachs-Burgaya, la exposición se aleja del carácter retrospectivo y se centra en una de las etapas más creativas del artista, el paso de la figuración expresionista a la abstracción, entre 1953 y 1965. Esta es la primera vez que se aborda el "salto adelante" de Subirachs hacia las tendencias vanguardistas occidentales. Una evolución que le permitió elaborar una gramática visual propia y perenne, convirtiéndose en un referente internacional de la escultura catalana de posguerra.
La exposición se centra en una de las etapas más creativas de Subirachs, el paso de la figuración expresionista a la abstracción
Subirachs. Del expresionismo a la abstracción (1953−1965) se articula a través de cinco ámbitos expositivos que presentan un total de 81 obras (48 esculturas, 32 dibujos y 1 tapiz) realizados por Subirachs en un periodo de doce años, entre 1953 y 1965. Los cinco ámbitos son: Expresionismo, Abstracción, El Hierro, Penetraciones y tensiones y Obra en espacios de dominio público.
Se trata de cinco ámbitos que incluyen recursos como los hierros, las cuñas, los calzos, los ensamblajes polimatéricos, las penetraciones y las tensiones. Además del proceso de profundización morfológica que, sin duda, se inspiró en la geometría reglada de Antoni Gaudí. En cambio, el último y quinto ámbito, Obra en espacios de dominio público, presenta, como decíamos, la obra pública y monumental más conocida por el público.
La exposición se articula a través de cinco ámbitos expositivos
Formado en la tradición del Novecentismo, Subirachs se distanció muy pronto de este corriente artístico para ir definiendo su propio lenguaje. La influencia de las vanguardias internacionales, que descubrió con veinticuatro años en su primer viaje a París, becado por el Instituto Francés de Barcelona, lo llevó a emprender un camino estético que derivó en un expresionismo personal, desarrollado a partir de 1953 y, sobre todo, durante su estancia en Bélgica (1954-1956). Así, la primera parte de la muestra está dedicada a la etapa expresionista de Subirachs.
La segunda parte de la exposición aborda el periodo abstracto del artista. Hacia finales de los años cincuenta, las figuras distorsionadas y expresivas se fueron despojando de anécdota para traspasar, casi de manera imperceptible, la frontera de la figuración a la abstracción.
Los descubrimientos plásticos y los recursos formales y conceptuales dotaron la obra de Subirachs de una densidad nueva, y lo convirtieron en pionero de una auténtica iconoclastia que lo alejó de la estatuaria tradicional. Cabe mencionar que la obra pública y monumental es la que le valió el reconocimiento público y la que consolidó el prestigio.
Pues bien, la exposición nos acerca al Subirachs más íntimo. El artista que también creó numerosas piezas de pequeño y medio formado destinadas al coleccionismo.
El hierro como recurso artístico
El hierro protagoniza el tercer ámbito expositivo. La ruptura de Subirachs con toda referencia figurativa se hizo todavía más evidente con la utilización predominante del hierro. Utiliza el hierro como herramienta expresiva a partir de formas lineales y diversidad de ritmos, con un sentido aéreo y, a la vez, agresivo e hiriente.
El espacio sustituyó el volumen como resultado de un proceso hacia un estilo cada vez más depurado. En las piezas de hierro, Subirachs adoptó una esquematización formal similar a la de las figuras expresionistas y a la de las primeras formas abstractas. Sin embargo, abandona la pureza y la textura coge protagonismo.
Subirachs acentuó el viraje hacia la abstracción con la utilización del hierro
La verticalidad, tradición de Juli Gonzalez, y el hueco son dos características de las obras que Subirachs realiza con este material, como, por ejemplo, Homenaje al cine (1958) o Hierro (1957), que podemos ver en este tercer ámbito expositivo.
Penetraciones y tensiones
El cuarto ámbito de la exposición presenta una etapa que comprende desde finales de los años cincuenta y el comienzo de los sesenta. En plena experimentación del lenguaje abstracto, Subirachs inició la serie que el crítico de arte José Corredor-Matheos calificó como "las penetraciones y las tensiones", con cuñas y cuñas encajadas, y tirantes y tornillos de hierro como elementos plásticos más habituales.
Obra en espacios de dominio público
El último sector de la exposición, que lleva el título de Obras en espacios de dominio público, presenta la obra pública y monumental más conocida por el público.