El tenista Novak Djokovic vuelve a ser protagonista. El motivo sigue siendo lo mismo: por la pandemia de la covid-19. En esta ocasión, sin embargo, la noticia es que el serbio ha decidido hacer una inversión y ha adquirido el 80% de la empresa biotecnológica de Dinamarca QuantBioRes, con el objetivo de desarrollar un tratamiento médico contra el coronavirus. Según la página web de la empresa, disponen de una tecnología, RRM, que ayuda a desarrollar tratamientos y curas para bacterias resistentes y retrovirus. De hecho, ya han hecho varios estudios sobre los mecanismos de infección sobre el SARS-CoV-2 y ahora trabajan en "diferentes tratamientos contra la enfermedad".
Esta apuesta de Novak Djokovic sorprende en un contexto en el que los negacionistas lo han convertido en un héroe por mantenerse firme en su decisión de no vacunarse contra la covid-19, hecho que le ha comportado ser deportado y expulsado de Australia y lo ha privado de jugar uno de los cuatro Grand Slam del calendario de tenis. Al Open de Australia, se ha sumado Roland Garros. Los organizadores de este Grand Slam, que se juega en tierra batida, ya han dejado bien claro que no dejarán participar en Djokovic, número 1 del ranking ATP, si no se vacuna. El martes, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, defendió que "no habría problema" en que el serbio disputara el Mutua Madrid Open, ya que es un "gran reclamo". Horas después, puntualizó que será el Gobierno quien decida si lo deja entrar o no al país.