Todos los trabajadores del Congreso de los Diputados, incluidos los periodistas, habrían llegado este miércoles a su casa a una hora razonable si Gerardo Pisarello no hubiera cometido un error que pasará a los libros de historia de la institución. A causa de un error en el voto telemático, las votaciones de los decretos ley de la discordia han acabado en empate y se han tenido que volver a repetir: han acabado tres horas más tarde. Todo, por un error en "el scroll", según ha argumentado él mismo. No ha concretado si se ha olvidado de hacer uso del ratón del ordenador, o si no ha tocado la pantalla táctil de su móvil cuando tocaba, pero eso ha hecho que no confirmara su voto. Periodistas y trabajadores de la cámara han hecho befa con el diputado de los comunes, que se ha disculpado incontables veces, avergonzado de su error humano.
Detrás de este voto despistado está el secretario primero de la Mesa del Congreso y dirigente d'En Comú Podem, Gerardo Pisarello. Se habría producido un "error" durante la votación telemática y no le aparecían todas las votaciones. Este fallo informático que explica el entorno del diputado de Sumar le podría haber costado al Gobierno de coalición la caída del real decreto de medidas anticrisis.
Solo después de concluir todos los debates, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha empezado a anunciar el resultado de las votaciones. Los siete diputados de Junts han optado por no participar, después de llegar a un entendimiento con el PSOE y los 343 parlamentarios restantes se han dividido en bloques casi iguales: 172 'sí' enfrente de 171 'no'. Este voto favorable de más ha salvado la primera de las iniciativas, el conocido decreto ómnibus. No obstante, en las siguientes votaciones solo se han contabilizado 342 votos. Excepto en el real decreto con medidas de conciliación laboral y de desempleo que Podemos ha girado al votar con PP y Vox, en el resto de puntos se ha producido un empate a 171. El voto de Pisarello no se había contabilizado y se ha tenido que repetir la votación.