ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
Una iniciativa explosiva. Un pastelero de la localidad flamenca de Kortrijk ha generado polémica en Bélgica para vender una edición limitada de chocolates con forma de granada y dar la mitad de los beneficios a organizaciones no gubernamentales que ayudan en Ucrania. "Refleja la realidad en tiempo de guerra. Es una señal poderosa que hará pensar a los consumidores", ha publicado en su página de Facebook el chocolatero Nicolas Beugnies, quien ha vendido ya 400 de las 2.000 piezas que comercializa a cinco euros, y que elabora tanto con chocolate blanco como negro y con chocolate con leche.
La mitad del dinero les destina a la plataforma Ukraine 12.12, creada por varias oenegés para ayudar a los ucranianos, que hace tres semanas que están en guerra desde la invasión de Rusia sobre este país. Por eso, el pastelero dice estar molesto con los que lo acusan de "querer enriquecerse con el sufrimiento de los otros".
Al hacer las cuentas, dando 2,5 euros por chocolate en la plataforma y descontando de la otra mitad impuestos, materias primas, mano de obra y embalaje, asegura no obtener ningún beneficio. "Nada. Definitivamente, estamos trabajando, pero es extra, ya que damos apoyo a una buena causa", ha asegurado Nicolas Beugnies, quien también comercializa sus chocolates mediante internet y venderá las granadas hasta el próximo 11 de abril. No obstante, hay los que censuran la chocante elección del molde. "Podrían haber hecho un corazón", ha declarado en el diario Metro un cliente de la chocolatería.