La NBA ha vivido una escena surrealista este domingo. En un partido entre Los Angeles Lakers y los Boston Celtics, el árbitro no señaló una clara falta sobre LeBron James y el duelo acabó yendo a la prórroga con un empate a 105. Aunque el jugador de los Lakers lo dejó correr, su compañero Patrick Beverley quiso exigir al árbitro una corrección. Para hacerlo, aprovechó la pausa antes del tiempo extra para aportar una prueba al asistente sobre su error dejando una imagen surrealista. El base de los Lakers cogió la cámara de un fotógrafo y, en medio del partido, enseñó al árbitro la secuencia de la falta sobre LeBron.

El jugador de los Lakers tenía razón: había una falta no señalada a favor de su equipo. Pero el árbitro, Eric Lewis, se mostró reticente a aceptar el error y pitó una técnica a Beverley por haber cogido la cámara durante el partido. La imagen del jugador, sin embargo, ha hecho la vuelta al mundo como una de las escenas más inverosímiles de la NBA. Hay que decir que Lewis, después del partido, admitió que se había equivocado.