El estreno de la ópera Werther en el Gran Teatre del Liceu ha tenido entre el público al president de la Generalitat, Carles Puigdemont, y a dos consellers, el de Cultura, Santi Vila, la de Benestar, Dolors Bassa. La obra, con música de Jules Massenet y basada en la novela de Goethe, llega al Liceu con una puesta en escena minimalista de la mano de Willy Decker. A juzgar por los comentarios del president, que ha tildado el estreno de "trabajo magnífico, delicioso", la obra vale la pena. Ahora sólo hace falta que la afición por la ópera se extienda al gran público.