Una de las especialidades de Leroy Merlin es proporcionar soluciones para cambiar el aspecto del hogar sin que tengamos que meternos en unas molestas reformas y sin que la liemos parda en casa. Y lo hacen con productos fáciles de instalar, de alta calidad y muy económicos.
En ocasiones incluso son ecológicos y ayudan a reducir las facturas de la luz, el agua y/o el gas. Y entre los productos más innovadores que la cadena francesa de grandes almacenes ofrece en su catálogo hemos descubierto una forma económica, limpia y sencilla de cambiar la cerámica de las paredes del baño o de la cocina sin necesidad de llamar a operarios ni complicarnos la vida.
Leroy Merlin tiene una pintura especial para cerámica de baños y cocinas
Esto es gracias a la pintura especial para cerámica de tu baño o cocina que puedes encontrar en Leroy Merlin. La puedes encontrar en hasta siete tonos diferentes. A saber: azul, beige, blanco, gris, marrón, negro o verde. Y las tienes disponibles en envases de distintas capacidades. Desde 0,75 litros hasta 2 litros. Y todos ellos a precios que van desde los 19,99 euros de los envases más pequeños hasta los 46,99 € de los envases de dos litros.
Además, debes tener en cuenta que Leroy Merlin tiene en marcha la campaña ‘Gran Fiesta de la Casa’. En ella, la cadena de grandes almacenes propone interesantísimos descuentos de hasta el 27% en muchos productos, así como el envío gratis en muchos de ellos. Y algunas de estas pinturas están rebajadas o cuentan con el envío gratuito.
De uso sencillo y rápido
El modo de uso de estas pinturas para cerámica de baño y cocina es muy sencillo. Antes de nada debemos dejar la superficie limpia y desinfectada. Debemos eliminar posibles restos de cal, impurezas o grasas. Además, es recomendable proteger la zona del suelo, los interruptores o lo que necesites con plástico o papel.
Una vez tengamos limpia la pared es hora de empezar a cambiar su aspecto. Debes saber que, tal y como indican desde Leroy Merlin, hay pinturas que requieren antes “una aplicación de una imprimación para favorecer la adhesión de la pintura”. En este caso debemos batirla con la pintura antes de verterla en la cubeta.
Ahora tomamos el rodillo, lo impregnamos y lo aplicamos en la zona como si se tratara de una pared normal. Se recomienda alternar una capa en cada dirección, prestando atención especial a las juntas.
Una vez hemos pintado lo que queríamos debemos retirar el papel o el plástico antes de que se seque la pintura. Así evitaremos desconchados.
Una vez seco es el turno de la pintura. Volvemos a proteger el suelo y seguimos los mismos pasos que con la imprimación, pero con la pintura para azulejos.
No obstante, fíjate bien en la pintura que compras, pues puede que no sea necesaria una imprimación previa.