La avispa asiática, conocida científicamente como Vespa velutina, se ha convertido en una preocupación creciente en España debido a su rápida expansión y su impacto negativo en las poblaciones de abejas, así como en la seguridad humana. Identificar esta especie de avispa es crucial para controlar su propagación y minimizar sus efectos adversos.
Uno de los rasgos más distintivos de la avispa asiática es su coloración. A diferencia de la avispa europea, la Vespa velutina presenta una tonalidad oscura en su cuerpo, predominando el color negro. Sin embargo, uno de los aspectos más característicos es la franja amarilla que cruza el cuarto segmento del abdomen. Esta franja amarilla es clave para distinguirla de otras especies de avispas.
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El tamaño también es un factor relevante. Las avispas asiáticas suelen ser más grandes que las avispas comunes. Las obreras miden entre 17 y 25 milímetros de longitud, mientras que las reinas pueden alcanzar los 30 milímetros. Esta diferencia de tamaño es notable y ayuda en la identificación visual.
Otra característica importante es el color de las patas. Las avispas asiáticas tienen patas de color oscuro, con las extremidades de un tono amarillo distintivo. Esta coloración bicolor en las patas es un indicador clave al observar a estos insectos.
La cabeza de la avispa asiática también presenta características diferenciadoras. Es de color negro con caras amarillas. Este contraste en la cabeza es otro elemento visual que facilita su identificación. Además, las antenas son de color marrón oscuro, complementando la paleta de colores que ayuda a reconocer esta especie. El comportamiento de estas avispas también puede ser un indicador de su presencia.
Mantente alerta a los nidos de avispas asiáticas
Las avispas asiáticas construyen nidos de gran tamaño, que pueden albergar miles de individuos. Estos nidos suelen estar ubicados en árboles altos. Los nidos tienen una forma esférica y pueden alcanzar dimensiones considerables, a veces comparables a un balón de fútbol. La construcción del nido con una entrada lateral también es característica de esta especie.
Es fundamental destacar que, aunque las avispas asiáticas son más agresivas hacia las abejas que hacia los humanos, es necesario tener precaución al identificar y manejar su presencia. En caso de sospechar la existencia de un nido, se recomienda contactar con las autoridades locales o servicios especializados en control de plagas para su manejo seguro y efectivo.
En resumen, identificar la avispa asiática implica observar su coloración oscura con franjas amarillas, su tamaño mayor, las patas bicolores, y la forma y ubicación de sus nidos. Reconocer estos detalles es esencial para tomar medidas adecuadas y proteger tanto a las poblaciones de abejas como a la seguridad pública.