Caminar en la playa o nadar en el océano puede ser divertido y relajante. Sin embargo, como en cualquier otra actividad, pueden ocurrir accidentes. Así que si estás de vacaciones y tienes pensado acudir a alguna de las muchas playas o calas de España, debes tener cuidado no sólo con las medusas. El erizo de mar está muy extendido por la costa española y el mediterráneo, de modo que debes vigilar cuando pises la arena en la orilla o estés dentro del agua, no vaya a ser que pises uno y te claves uno de sus finos pinchos. Por eso la OCU ha dado un informe de las cuatro picadas que debes evitar en este verano.
Sol, mar, vacaciones. y también insectos, medusas y compañía, compañeros habituales en este tiempo que pueden llegar a ser muy molestos. Reaccionar deprisa y saber cómo actuar es clave: en estas situaciones, rapidez rima con eficacia. Las picaduras en el mar no solo son molestas, sino que también pueden ser sumamente peligrosas. Por ello, se debe tener especial cuidado cuando se entra en la playa, fijarse muy bien dónde se pisa y también alrededor. La prevención y el cuidado son las mejores armas para evitar un encuentro con algunos de estos animales, y así evitar pasar un mal momento. También es importante siempre respetar las advertencias de los guardacostas y salvavidas.
La picadura de medusas, una de las más peligrosas
Los encuentros con las medusas son mucho más comunes de lo deseado. Es difícil prevenirlos, aunque siempre es bueno revisar el agua antes de entrar y no hacerlo si se observa la presencia de medusas u otro animal. La picadura de la medusa es sumamente dolorosa, de hecho, deja en la piel miles de agujeros muy pequeños que se conocen como nematocistos. La picadura de la mayoría de las medusas, aunque dolorosa, no representa mayor peligro para el ser humano. Sin embargo, algunas pocas especies, como la conocida como Avispa de Mar, puede ser potencialmente mortal. Esta especie se encuentra principalmente en Australia.
La picadura carabela portuguesa no son tan frecuentes pero hay que ir con cuidado. Es propiamente una medusa, aunque filogenéticamente está emparentada con ellas. La carabela portuguesa es un organismo que se encuentra habitualmente en aguas cálidas, sobre todo en regiones tropicales y subtropicales, pero de forma ocasional algunos ejemplares pueden llegar a las costas españolas. Su picadura es muy dolorosa. En personas alérgicas o muy sensibles a su veneno podría llegar a causar la muerte. Aunque sea una situación improbable en nuestras costas.
Aunque menos común, también se puede encontrar al pez araña escondido en la arena. Un bañista puede pisar las púas que sobresalen de la arena e inocular el veneno de las mismas. Esta picadura produce un dolor intenso, picor, inflamación. La persona puede sentirse mareada, con dolores de cabeza, vómitos y en casos más graves sufrir de arritmias cardíacas. Otro de los animales más comunes que se pueden encontrar en la playa es el erizo de mar. Los erizos están revestidos por espinas muy afiladas, punzantes y en algunas ocasiones contienen veneno. Pisar uno de estos animales es muy doloroso y las espinas pueden fragmentarse dentro de la piel. Si estas espinas no se extraen pueden generar inflamación.
Si te pica uno de estos animales, aplica estos primeros auxilios para aliviar el dolor
1) Lava la lesión con agua de mar (o con suero fisiológico), nunca con agua dulce: en ese caso aumenta la liberación de veneno y te dolerá más.
2) No frotes ni rasques la piel.
3) Aplicar hielo te aliviará, pero con la precaución de que al derretirse el agua no entre en contacto con la zona (usa una bolsa de plástico o una tela impermeable).
4) Si la inflamación es grande, acude al médico: puede ser necesario tratamiento con una crema de corticoides o un analgésico. Y vigila la herida, pues podría infectarse.