Las rebajas de verano 2022 empiezan con una mala noticia para tu economía, sobre todo si eres cliente habitual de Zara y, debido al confinamiento por covid, te has acostumbrado a hacer las compras online en lugar de ir físicamente a la tienda de turno. Coincidiendo con el inicio de su período de sus segundas rebajas, Zara ha empezado a cobrar gastos de envío en ciertas condiciones en donde previamente el pedido te llegaba a casa de forma totalmente gratuita. En concreto, desde el día 22, si tu pedido online solo incluye artículos con descuento (algo muy normal en plenas rebajas), tendrás que pagar 3,95 euros por el envío estándar, incluso si tu cesta virtual supera los 30 euros (condición que, hasta ahora, te libraba de pagar por el envío). Lo mismo ocurre si decides recoger el pedido en un punto de entrega: pagarás 3,95 euros si solo has comprado artículos rebajados, como ropa o accesorios.

Si quieres que los gastos de envío de tu compra online en Zara sean gratuitos, tienes 2 opciones: o recoger el pedido en tienda (y eso es complicado en plenas rebajas porque muchos establecimientos desactivan esta opción) o bien incluir en tu cesta virtual algún producto que no esté rebajado (lo cual anula completamente el propósito ahorrativo de comprar en rebajas). Esta medida ya ha sorprendido a los primeros clientes de las rebajas de Zara, ya que, en los últimos dos años, esta firma de Inditex había convertido su envío estándar en una opción totalmente gratis para facilitar la vida durante las épocas más duras del covid.

Además, en un futuro cercano, Zara podría implementar otra medida polémica que ya se ha puesto en marcha en otros países: cobrar las devoluciones con recogida a domicilio. En Reino Unido o en Alemania, por ejemplo, si has comprado un pedido online en Zara, y quieres devolverlo, debes pagar 1,95 euros de gastos de envío, que se acaban restando del total de tu reembolso. Por ahora, en España las devoluciones son gratuitas, pero en cualquier momento podrían dejar de serlo. Cuando eso ocurra, el enfado por parte de sus clientes estará más que servido. Según un estudio de Outvio, empresa especializada en optimizar procesos de e-commerce, el 66,6% de los compradores españoles dan por hecho que la devolución siempre es gratuita, y un 45% de los consumidores admite que dejaría de comprar en cualquier tienda si de repente las devoluciones cuestan dinero. ¿Qué harías tú si dicha situación se acabara produciendo?

Otra prueba que indica que pronto Zara empezaría a cobrarte por las devoluciones es que eso ya es una realidad en otras marcas bajo el grupo Inditex, como es el caso de Oysho o Pull & Bear. En ambas tiendas, una devolución a domicilio cuesta 3,95 euros (se deduce de tu reembolso). En el caso de Oysho, devolver un pedido online dejándolo en un punto de entrega cuesta 2,95 euros (en pedidos menores de 40 euros). El objetivo de estas medidas cada vez más comunes es incentivar al consumidor a devolver sus pedidos online en tiendas; Inditex y compañía ganan especialmente tiempo, ya que, si viene el cliente con el pedido que no quiere, los productos devueltos se pueden recolocar con mayor celeridad a la cadena de distribución.

¿Y a qué se debe el inesperado cambio de cobrar gastos de envío en pedidos online con productos exclusivamente rebajados? Según explica un exhaustivo análisis de El Diario, la causa principal es un aumento tanto de las compras online como de las devoluciones online. Estas últimas ahora representan un 15-30% del total de unidades compradas en tiendas online. Para las marcas, esto implica que el coste de los gastos de envío, antaño marginal debido a que muchos consumidores preferían comprar en tiendas, se ha hecho relevante y empieza a afectar sus márgenes de beneficios.