"Estábamos super chill con un bro tomando algo en un bar random de la Plaza Major de Vic y lol, tio, pasó un crush super semado que no me quito de la cabeza, en plan si la vuelvo a ver le pregunto cómo se llama, de buenri". Si has leído esta frase y no lo ha entendido, no sufras, sencillamente significa que tienes más de treinta años y, por lo tanto, no eres millennial. O, sin embargo, no formas parte de la Generación Z, a menudo incluída dentro de los millennials, a pesar de estar más cerca de los centennials. Cuando este pasado julio disfruté como un camello leyendo Entre el cel i l'infern, la monumental biografía de Verdaguer escrita por Àlvar Valls, durante toda la lectura no paré de pensar en el enorme abismo existente entre la lengua de Verdaguer y la lengua actual: ni mosén Cinto entendería una pizca de cómo hablan los jóvenes hoy en día ni los jóvenes catalanes, la generación millennial, entienden la mitad de palabras escritas por Verdaguer. ¿Es posible, sin embargo, en un mundo globalizado y cosmopolita, impedir que la lengua deje de ser genuina para convertirse cada vez más en un híbrido entre el catalán, el inglés y el castellano?
Como en La Tumbona nos gusta hablar claro y sin tapujos, a pesar de apreciar que el catalán coloquial es cada dia menos genuino, por eso hoy presentamos 9 palabras millennials que tendríamos que conocer si no queremos ser considerados unos boomers por estos jóvenes, los millennials, que hablan la lengua del futuro mientras se peinan como tu abuelo cuando hizo la mili en la posguerra.
1. Boomer
Posiblemente lo que tú eres si estás leyendo este artículo. Alguien que quizás todavía cree que decirle a un joven "efectiviwonder" para afirmar alguna cosa es ser moderno cuando, en realidad, es sinónimo de ser un fósil en vida. Quizás tienes ochenta años o quizás naciste poco antes de la caída del Muro de Berlín; quizás eres un nostálgico de la Barcelona preolímpica o quizás te crees moderno para escuchar Lax'n'Busto o Metallica. Da igual, sea como sea, no conocer la expresión boomer te convierte automáticamente en un boomer, es decir, en alguien pasado de moda. Admítelo y, cuando lo hayas aceptado, di next.
2. Next
A pesar que la traducción de la palabra inglesa 'next' sea "posterior", "consecutivo" o "siguiente", el next que nos ocupa va mucho más allá y sencillamente significa pasar de alguna cosa o, si lo queremos describir con lenguaje millennial, sudar de alguna cosa o de alguien. ¿Te ha dejado la pareja y quieres rehacer tu vida? Next. ¿Tu jefe te ha hechado la bronca por un error que no has cometido tú? Next. ¿Te han invitado a una fiesta donde sabes que hay personas que te dan más pereza que una barra de pan sin sal? Next. Si quieres pasar página sin utilizar el término "pasar página", next.
3. Random
Conviene hacer una apreciación importante: la palabra "cualquiera" siempre ha sido escasa en lo que a sinonímia se refiere, ya que quizás a Verdaguer o a Espronceda les pegaba decir "otrora", pero si un adolescente con aspiraciones de hacerse cantante de trap lo utiliza en alguna canción, lo más probable es que no acabe dedicándose a la música y, sobre todo, pierda a todos los amigos. Una cosa random es una cosa cualquiera o aleatoria que contiene el aliciente de ser inesperada. Por ejemplo, se puede quedar para toma algo en Gracia sin especificar el bar y afirmar que "ya nos sentaremos a hacer una cerveza en algún bar random", pero si paseando por la calle vemos que alguien hace una cosa sin motivo aparente, como por ejemplo detenerse en un semáforo y ponerse a cantar la Santa Espina mientras está de color rojo, diremos que "lo hizo de repente, en medio de la calle Mallorca, y fue super random".
4. En plan
¿Sabes a aquella gente que acaba todas las frases diciendo "¿me entiendes?" o, todavía peor, la que las acaba diciendo "no sé si me explico"? Pues los jóvenes hacen el mismo, pero con la muleta en plan, que utilizan hasta la saciedad y casi sin un uso específico concreto. En un principio, el uso original es a modo de comparación (como también el popular del palo), por ejemplo "el mar estaba calmado, en plan como una bañera," aunque con el paso del tiempo el significado original se ha ido diluyendo y actualmente ya es simplemente una forma exclamativa de reforzar aquello que se dice: "me dijo que le molaba estar conmigo, en plan te amo, sabes"? o "para una buena paella se calcula un manojo de arroz por persona, en plan poco".
5. Lol
Si hace pocos días hablábamos de las diversas aceptiones del término joder, el concepto lol ligaría con la mayoría de veces que mostramos sorpresa o estupefacción ante una cosa inesperada, como por ejemplo una ola de quince metros en la playa o la noticia que un rey emérito con investigaciones judiciales abiertas se fuga de su país con el beneplácito de un gobierno central en el cual gobierna en coalición un partido que se considera republicano. Lol, por lo tanto, sería un sinónimo de "caray! "ostras! "joder!" y, sobre todo, "no me lo puedo creer"!, pero además también se utiliza en caso de que la causa de la sorpresa haga gracia, a menudo una gracia nacida de la ironía o incluso de la lástima.
6. Semao
Término que denota una exclamación absoluta ante alguna cosa exagerada, bien sea un golazo de Messi por la escuadra, el increíble final de la última temporada de tu serie preferida o la enésima resolución surrealista emitida por el Tribunal Constitucional. El adjetivo semao, en definitiva, se aplica a quien hace alguna cosa singularmente anómala pero sin vergüenza de hacerla, por eso es semao que Marc Márquez intente correr una carrera 48h después de haber sido operado al brazo, por ejemplo.
7. Crush
Dice la leyenda que Jacint Verdaguer, en sus tiempos de estudiante en el Seminario de Vic, tuvo un crush en la Plaza Major. Evidentemente supo reprimirlo, pero por norma general un buen crush es irreprimible: acto de cautivarse repentina e intensamente de alguien. Si un poeta capaz de utilizar el precioso verbo "enmelar" para escribir "Adéu-siau, cançons de primavera; ja no emmelareu mos llavis altra vegada, ja no fareu batre les ales del meu cor" levantara la cabeza y viera que ahora ya nadie enmela, sino que los jóvenes se comen la boca después de un crush fortuito, quizás volvería a caer de golpe al bache.
8. Hype
¿Recordáis aquello que sentisteis cuando apareció una misteriosa organización denominada Tsunami Democràtic? Aquello era un hype: cuando alguna cosa produce una intriga y un deseo permanente de descubrir más detalles. Se acostumbra a utilizar para hablar como series o películas, ya que por ejemplo los trailers son capaces de provocar un buen hype, pero ni Hollywood ni Netfix ni ninguna historia de estas serán nunca capaces de igualar el pasmo orgásmico y efervescente que provocaban aquellas notificaciones en el Telegram en las cuales leíamos "Comunicado del Tsunami". Qué días tan llenos de hype, por el amor de Dios. Lástima que después de tanto código QR y tanta emoción, tener todavía instalada la aplicación del Tsunami en el móvil sea, en palabras de un millennial, un gran fail.
9. Chill
Para acabar, la palabra preferida de La Tumbona, el suplemento estival de ElNacional.cat pensado para ser leído calmadamente y sin prisas. Proveniente del género musical chill out, característico por su ritmo relajado, chill se ha convertido en la palabra preferida para referirse precisamente a eso: un momento de calma o un estado de relajamiento, pocas prisas y calma. Alguien echado en el sofá está chill, un grupo de amigos compartiendo una Xibeca en el jardín de casa una noche de verano están chill y, si fueran millennials, los monjes franciscanos del monasterio de Poblet haciendo su voto de silencio están super chill. La palabra incluso ha generado el verbo chilling, que es el acto de estar chill, como por ejemplo: "Estoy chilling leyendo La Tumbona". ¿Lo has entendido, boomer?