El escritor y corrector Albert Jané ha ganado el Premi d'Honor de les Lletres Catalanes por su compromiso con la lengua catalana y la normalización de un idioma que aprendió de manera autodidacta. "Un referente indiscutible en el campo de la lengua", tal como lo ha bautizado el jurado y en palabras de Xavier Antich, presidente de Òmnium Cultural. Jané ha centrado su actividad profesional en el estudio y la enseñanza de la lengua, sobre todo en la literatura infantil y juvenil, siendo parte indispensable de Cavall Fort. En palabras del filólogo Jordi Martí: "Es el continuador más fiel de la obra gramatical de Pompeu Fabra".
Jané es el inventario del modelo de lengua de nuestros chiquillos, traduciendo cómics en catalán cuando no había en nuestra casa y superando reticencias que venían de todas partes, así como poniendo palabras a referentes de varias generaciones, como Els Barrufets, Sergi Grapes, Lucky Luke o El gat amb botes, que sin él nunca hubieran hablado en catalán. Además, fue el creador del verbo barrufar. "Ha construido un imaginario en catalán para los pequeños en un reto mayúsculo, y es que no era suficiente con imágenes modernas sino que también se tenían que construir unos valores", ha comentado Antich.
Nacido en Barcelona en 1930, y con 94 años, también ha adaptado al catalán grandes clásicos de la literatura universal —como Pinotxo, La caputxeta vermella, Blancaneu o Charlie i la fàbrica de xocolata, entre muchos otros—. El presidente de Òmnium ha destacado la aportación incalculable a la lengua desde muchos flancos —gramático, lingüístico, traductor, profesor, periodista, activista o poeta—, de un hombre que ha trabajado incansablemente por la lengua catalana de manera genuina, humilde y modesta, trabajando durante décadas de manera casi anónima, pero con una contribución mayúscula en el campo de la lengua. "Estamos delante de un autodidacta que empezó a estudiar catalán por su cuenta", ha explicado Xavier Antich.
El nombre de Albert Jané va muy ligado a Cavall Fort, y es que estuvo 17 años como redactor y 18 como director, seguramente uno de sus legados más populares. Este hito lo ha configurado como una de las personalidades catalanas que más ha hecho por la literatura infantil y juvenil en la época de la transición y cuando el catalán estaba resignado al ostracismo sociopolítico. Su producción comprende más de 60 libros, más de 200 obras traducidas y más de 150 álbumes de cómics traducidos. En 1997 se jubiló y, actualmente, el escritor vive en una residencia. Asegura que allí sigue escribiendo a mano, un dietario y algún encargo que le llega. "Cada mes escribo algo de poesía y se lo envío a mis amigos, es mi actividad", ha explicado Jané, que se considera obrero de las letras, pero que nunca se ha visto como un "héroe, lo he hecho con mucha naturalidad".
El galardón es uno de los máximos reconocimiento literarios en lengua catalana, otorgado por Òmnium Cultural y con una dotación económica de 20.000 euros, y con él se reconoce la tarea de una persona "por su obra literaria o científica en lengua catalana, y por la importancia y ejemplaridad de su tarea intelectual, que haya contribuido de manera notable y continuada a la vida cultural de los Països Catalans". El acto de entrega se celebrará el próximo 17 de junio en el Palau de la Música Catalana.