Hace menos de una semana, la polémica sobre el racismo en el mundo del futbol volvió a salir a flote después de los insultos que recibió Vinicius desde la grada. Este es solo un ejemplo de los muchos actos racistas que todavía imperan en nuestra sociedad. La discriminació por raza o grupo étnico sigue siendo un lastre que convive y perdura. Aunque cada vez hay más cortafuegos y filtros para revisar y deslegitimar cualquier discurso discriminatorio, el racismo sigue formando parte del ADN social: se nota en actos cotidianos que pueden parecer imperceptibles a ojos de los privilegiados, pero que son la base que sostiene una estructura segregacionista por motivos de raza. La configuración de nuestro mundo depende de muchos factores —la educación, la familia, los valores morales de nuestra comunidad, la cultura, etc.—, pero también de algo que mamamos inconscientemente todos los días y en todo momento: la publicidad.

🟠 Confesiones de un millennial que creció con personajes machistas
 

🟠 De Quimi y Valle a Ruth y Gorka: el amor tóxico en las series juveniles de los 90 y los 2000
 

¿Recuerdas la melodía de algunos anuncios de la época o aquellos leitmotivs cuya redundancia hacía que se adoptaran en el habla cotidiana? Por aquellas, sin la existencia de redes sociales o de influencers promocionando productos, la televisión era el mayor escenario de una publicidad que se caracterizaba por melodías pegadizas e iconos visuales. Tanto que, algunas de ellas, todavía resuenan en el imaginario colectivo con una facilidad arrolladora. Algunas se repiten por mimetización sin siquiera profundizar en el mensaje: y esa es una de las muchas patas que sigue alimentando muchos discursos en nombre de la nostalgia.

1. El 'negrito' de Cola-Cao

"Yo soy aquel negrito del África tropical"... te suena, ¿verdad? Probablemente es una de las canciones publicitarias más repetidas en la infancia, teniendo en cuenta que era la canción por antonomasia de un producto cuyos consumidores eran mayoritariamente niños y niñas: el Cola-Cao. En su vídeo promocional, a base de animación, el soluble de chocolate más famoso de todos los tiempos apelaba a la mano de obra racializada que trabajaba los campos de cultivo, con una canción entonada por uno de ellos en la que se mostraba con una actitud simpática y alegre. Lo que no se contaba era el lastre de la esclavitud de las personas negras ni la explotación laboral a la que estaban sometidos. Lejos de recapacitar, la marca volvió a utilizar la canción años después, pero esta vez cantada por tres futbolistas mulatos: Rivaldo, Roberto Carlos y Denílson.

2. Los conguitos y la caricaturización

Otro anuncio para el olvido fue el de la marca de cacahuetes recubiertos de chocolate. El nombre ya es polémico y racista per se, porque Conguitos es un diminutivo que hace referencia expresa al país de El Congo y la mascota de la marca representa a un aborigen negro, estereotipando claramente los rasgos étnicos, como por ejemplo la forma de los labios. Se creó en 1961 pero su imagen siguió perpetrándose, hasta que a mediados de los 90 se llegó a caricaturizar a personajes como Tina Turner o Stevie Wonder como conguitos animados. 

3. Coca-Cola, racista y clasista

La famosa marca americana es un hacha de la publicidad y siempre suele dejar spots para la posteridad. Pero en toda su historia no ha estado exenta de polémicas, ligadas también a anuncios archi conocidos alrededor del mundo. ¿Recordáis la canción que decía Del Pita Del? Más allá del ritmo pegadizo, representa a un camarero de origen hindú que está sirviendo en una fiesta de gente de clase alta, y cuando bebe un trago de Coca-Cola para reponerse, una señora le riñe de muy malas maneras diciéndole que "usted está aquí para servir las bebidas, no para bebérselas". Para algunos fue un guiño a las culturas asiáticas después de tener siempre el ojo puesto en referentes occidentales, pero lo cierto es que el racismo y el clasismo del contenido es más que evidente. 

Ya lo ves: tal vez los referentes de antaño con los que creció gran parte de la etiquetada como generación Y no eran tan bonitos como dictaminaba la nostalgia. Y, precisamente, de toda esta toxicidad nace Retrovisor pop, la sección audiovisual fast-food de ElNacional.cat que revisa la cultura pop que hemos consumido los millennials en los 90' i 00's. Aquí encontrarás todos los vídeos.