El 26 de febrero se inaugurará el Año Carner en el Saló de Sant Jordi del Palau de la Generalitat. Será la apertura oficial de unas celebraciones para conmemorar los 50 años de la muerte de este intelectual y que se prolongarán hasta el mes de junio de 2021. Con este acontecimiento, según Jaume Coll, comisario del Año Carner y marmesor y editor de la obra de Josep Carner, se quiere rendir honores a un "gigante de nuestra sociedad". "Lo que conocemos de él sólo es la punta del iceberg de su obra", por eso ha insistido en la oportunidad de esta conmemoración. Un acto especialmente necesario porque la última estancia de Carner en Catalunya, poco antes de su muerte, fue complicada y traumática. La programación todavía no está terminada, porque se prevé añadir nuevas actividades, pero se puede ir consultando a través de la página web del acontecimiento.
Una vida en tres etapas
Coll ha decidido segmentar el Año en tres ámbitos, correspondientes a las tres etapas de la vida del autor: la etapa barcelonesa, la marcha al exilio voluntario, primero, y al exilio forzado, posteriormente. Coll ha destacado, en la etapa barcelonesa, el papel de Carner como poeta y como activista cultural (a través de su tarea como editor y como director de publicaciones, pero también como colaborador de Prat de la Riba). La segunda etapa estuvo caracterizada por su incorporación en el cuerpo consular y por su marcha del país. Según Coll en esta decisión fue clave la desaparición de su protector y el matrimonio de Carner. En el extranjero este escritor se impregnará de nuevos paisajes, en Génova, en Costa Rica, en Le Havre, en Hendaya, en Bruselas, en Madrid, en París, en Beirut... En su estancia en el Líbano, por ejemplo, se dejó fascinar por el desierto; y eso se sería clave para la publicación de Nabí. Pero, además, entró en contactos con autores de diferentes partes del mundo (Coll ha destacado sus conexiones con Paul Valéry)... El 1939 su vida entró en una tercera etapa; Carner, con muchos otros intelectuales, se marchó de Francia hacia México D.F. Posteriormente, con su segunda mujer belga, s'establecería en Bélgica, como profesor de la Universidad Libre de Bruselas. Coll asegura que durant aquest Any Carner también se hablará del último retorno del poeta a Catalunya, poco antes de su muerte, con sus facultades mucho mermadas: "un episodio triste de su vida".
El Carner literario
Jaume Coll ha explicado que han querido en el Año Carner reflejar todos los aspectos de este autor. Habrá un espacio para todas sus aficiones, como el teatro, pero sobre todo se tomará mucha atención a la música. Coll ha recordado que muchos compositores catalanes, algunos de gran talla, han musicado sus poemas. En el Palau de la Música habrá un triple homenaje a Carné, que culminará el 6 de junio de 2021 con una representación de El giravolt de maig (de Eduard Tolrà, con música de Carner), con dirección del maestro Ros-Marbà. En la conmemoración de la muerte se hará una lectura de poemas de Carner en el cementerio de Montjuïc. Del 9 al 11 de febrero de 2021 se celebrará un gran congreso sobre Carner organizado conjuntamente por las doce universidades de los Países Catalanes que tienen estudios humanísticos, con una doble sede en el Instituto de Estudios Catalanes y a la Universidad de Barcelona. Paralelamente, la Biblioteca de Catalunya organizará una exposición sobre Carner, con unos 170 títulos publicados (entre obra propia, traducciones y prólogos. Coll ha asegurado que, a pesar de todo, lo más importante es que durante los años 2020 y 2021 habrá nuevas reediciones de la obra de Carner que permitirán seguir divulgando la obra del autor. Entre otros, aparecerán nuevos tomos de la obra completa de Carner, que está publicando Ediciones 62.
Una cátedra para Carner
Mariàngela Vilallonga ha apuntado que uno de los proyectos estrella de este Año Carner es que el IEC lidere una cátedra Carner adscrita a la Universitat de Barcelona, con financiación privada, para perpetuar el legado de este autor y permitir la formación de nuevos expertos en su obra. Pero este proyecto todavía está pendiente de poder materializarlo. El IEC organizará también una exposición sobre este autor, considerado uno de los puntales de la institución. Y, a nivel simbólico, se bautizará un ferrocarril de la Generalitat de Catalunya con el nombre "Josep Carner" con lo que se pretende difundir el acontecimiento y darle continuidad (en 1907 Carner había dedicado un poema a los ferrocarriles, que en aquel momento no llegaran ni a Sant Cugat). Coll ha prometido que también se intentarán hacer actos sobre Carner a todas las poblaciones donde el poeta había presentado obras suyas a los Jocs Florals.
Protagonismo belga
La consellera de Cultura, Mariàngela Vilallonga, ha querido reivindicar a Carner como mucho más que el "príncipe de los poetas": apunta que además fue periodista político, traductor, diplomático, crítico, miembro de la Sección Filológica del Institut d'Estudis Catalans... Por ello ha animado a continuar estudiando su obra. Oriol-Ponsatí Murlà, director del Institució de les Lletres Catalanes, ha prometido una "conmemoración nacional" gracias a las complicidades con muchas entidades, con muchas instituciones y con muchos particulares, establecidas por el comisario Jaume Coll. Incluso ha anunciado varios actos en Bruselas, ciudad de la muerte de Carné y localidad muy simbólica para los catalanes en las situación actual.