Miles de personas han llenado la Rambla, el Paseo Marítimo y la playa de los Pescadores de Badalona (Barcelonès) en la Quemadura del Demonio de este 2018. Como marca la tradición, el emblemático personaje, que este año tenía aspecto de preso político cerrado en una celda con el número 155 en la parte frontal, ha iluminado la noche del 10 de mayo, víspera de Sant Anastasi, patrón de la ciudad. Tal como ya anunciaron hace unos días, los representantes del PP y los de C's en este Ayuntamiento no han tomado parte en la cita al considerar que el ejecutivo local ha "politizat" la celebración escogiendo esta figura como protagonista de las fiestas. La jornada también ha contado con un piromusical, el Séquito de la Ciudad, que ha llegado desde el Ayuntamiento o el Auto sacramental, un baile de tradición milenària que simboliza la lucha entre el bien y el mal y que hace una sátira de la actualidad en el último año.

Las llamas han hipnotizado a los millares de badaloneses que este jueves se han reunido en torno a la playa de los Pescadores para ver cómo el demonio de este año despedía los malos augurios. En pocos minutos el fuego ha convertido en cenizas la polémica figura que desde hace días presidía la playa de la ciudad.

Antes sin embargo, el centro de la villa se ha teñido de fiesta gracias a los grupos de cultura popular de la ciudad que han ofrecido al Séquito de la Ciudad bajando desde la casa consistorial hasta el paseo Marítimo. Allí, ha tenido lugar la Tanda de Lucimiento y el Auto sacramental que este 2018 ha dirigido sus críticas hacia el ejecutivo de Mariano Rajoy y la justicia española. Los participantes no han olvidado a la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, los presos políticos y los lazos amarillos.

Con respecto al piromusical, en esta ocasión ha sido dedicado a las grandes voces femeninas de la historia. Han sonado temas tan conocidos como 'El guardaespaldas' de Whitney Houston; 'Mama mia' de Abba, 'Material girl' de Madonna o la versión de 'Loco por ti' de la colombiana Shakira.

Una figura polémica

El representantes del PP y C's de Badalona anunciaron la semana pasada que no participarían en la popular crema del demonio ni en los actos institucionales previstos con motivo de las Festes de Maig. Consideran que se ha "politizado" la cita al escoger como protagonista de este año esta figura. "Es una vergüenza y una irresponsabilidad que la alcaldesa politice incluso una fiesta como la del demonio y nos expulse además del 70% de los ciudadanos", afirmó el presidente del PPC y concejal badalonés, Xavier García Albiol.

Desde el gobierno local, el tercer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Badalona, Josep Téllez, recordó que el diseño se había escogido a través de un proceso participativo y que no había ninguna intención municipal detrás de la elección.

Esta es la primera vez que la elección de la obra se ha abierto a la participación ciudadana. Un total de 772 personas tomaron parte en la votación y 331 se decantaron por este diseño. Se trata de una creación del dibujante publicitario badalonés Antonio Amador que bautizó esta figura como 'El Demonio que llamó libertad'.

Una tradición del siglo XVIII

Esta celebración se basa en la obra 'Cajón de Sastre', del Varón de Madà que explica que el año 1785 unos pescadores quemaron una figura de grandes dimensiones en la playa. El año 1940 la Cofradía de Sant Anastasi quemó al primer demonio de Badalona en la calle del Templo y poco a poco se fue convirtiendo en una tradición. Con el paso del tiempo la quemadura se trasladó a la playa y con la llegada de los ayuntamientos democráticos se convirtió en la principal fiesta de la ciudad. El año 1991 la Generalitat la declaró de interés turístico.