Rosalía ha brillado en el Palau Sant Jordi delante de 15.000 personas que hacía meses que esperaban como agua de mayo el día 7 de diciembre. La cantante de Sant Esteve de Sesrovires ha hecho esperar a sus fans catalanes pero, después de una gira que la ha llevado por los mejores escenarios del mundo, finalmente ha aterrizado en la capital catalana para hacer dos conciertos que ya serán de los últimos de la gira de su disco El Mal Querer.

Un Sant Jordi donde no cabía un alfiler ha esperado pacientemente y, a las 21 h puntual, Rosalía ha pisado el escenario ante un griterío entusiasmado que esperaba la cita con ganas. Vestida con un body rojo con unas mangas anchas, Rosalía ha cantado 'Pienso en tu mirá' y 'A Palé' y ha sido después de estos dos temas que ha dado la bienvenida a los asistentes muy emocionada, con las manos en la cara y conteniendo las lágrimas de ver el recinto "tan lleno", en su casa.

En una hora y media la cantante catalana ha interpretado todos sus éxitos (no se ha dejado ni uno) y, hablando en catalán durante prácticamente todo el concierto, ha explicado a sus fans que "el flamenco le gusta más que la pizza". Ha sido en este momento cuando ha querido tener unas palabras para su profesor de flamenco, Chiqui de la Línea, a quien ha agradecido, aprovechando que estaba presente entre el público, todo el que le enseñó cuándo ella empezó y no sabía "nada de nada". "El flamenco es una gran pasión", ha suspirado.

El palacio ha hervido con 'Milionària', 'Brillo', 'Con altura' o 'Yo x ti, tú x mí'. 'Malamente', la canción que la dio a conocer al gran público y por la cual ha sido reconocida con varios premios, ha sido la último en resonar en el Palau este sábado por la noche, hoy domingo lo volverá a hacer. Al ver que las entradas para el 7 de diciembre se vendieron en escasos minutos, la cantante de Sant Esteve de Sesrovires tuvo que fijar otra fecha para sus fans catalanes, la de hoy día 8 de diciembre.

La artista, que ha repartido camisetas de su nuevo merchandising, ha actuado en un escenario que incluía una plataforma, custodiada de dos pantallas donde se la ha visto en directo y donde también se han proyectado otros vídeos. A los asistentes, que al inicio han coreado su nombre al unísono, se les ha hecho corto el concierto, que ha durado cerca de una hora y veinte minutos.

Este ha sido el primer concierto en un recinto tan grande como el Sant Jordi y sin estar englobado en un festival. Esta actuación, como la del domingo y la del martes en el Wizink de Madrid servirán para cerrar la gira de 'El Mal Querer', que la ha afirmado como diva y estrella internacional. La gira de 'El Mal Querer' ha llevado a la cantante por los Estados Unidos, Portugal, Inglaterra o Suiza. En Barcelona lo hizo en el marco del Primavera Sound, primer baño de masas con el público barcelonés; y, un año antes, debutó en el Sónar. A los fans de Rosalía se les hará larga la espera hasta que no saque un nuevo disco y vuelva a la capital catalana.