Born. Memòries d'un mercat es la exposición que se acaba de inaugurar en el Born, Centre de Cultura i Memòria. Se trata de un intento de reivindicar el papel de este mercado (y del conjunto de los mercados) en la historia y en la memoria popular de los barceloneses. Ricard Vinyes, comisionado de Programas de la Memoria del Ayuntamiento de Barcelona y responsable de esta actividad, ha vinculado la inauguración de la exposición con un proyecto más amplio, de reivindicación de la memoria popular de la ciudad. Por eso Born. Memòries d'un mercat, va acompañada de una serie de actividades divulgativas, pero al mismo tiempo con un llamamiento a todos los ciudadanos a participar en el proyecto. La exposición ha sido comisariada por tres profesores de la Universitat Politècnica de Catalunya: Manel Guàrdia, Ramon Graus y José Luis Oyón. Han trabajado desde el 2005 en este proyecto, con una larga tarea de archivo, y también con entrevistas a mucha gente involucrada en la historia del mercado: vendedores, trabajadores, clientes, vecinos... Sin embargo, por cuestiones administrativas y políticas esta exposición se fue retrasando, hasta ahora que, finalmente, ha podido salir a la luz. Estará abierta hasta el 26 de noviembre, y hasta el 17 de abril se podrá visitar gratuitamente.
Reivindicación de los mercados
Esta exposición quiere reivindicar el Born, no sólo como edificio emblemático de la ciudad, sino también como mercado, como espacio que articuló un barrio. Gerardo Pisarello, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento, ha recordado que el Born es un espacio de memorias (en plural). Afirma que el Ayuntamiento ha querido que esta exposición constituyera una reivindicación del mercado como una entidad que genera solidaridades, una "herramienta para mantener vivos los barrios" frente a una sociedad de mercado que elimina los mercados. "Si todos los negocios quedan en manos de las grandes cadenas, tendremos una ciudad mucho más homogénea y mucho más pobre", ha afirmado Pisarello. El teniente de alcalde ha querido recordar que si el Born es hoy una estructura al servicio de la ciudad y el país, es gracias a la lucha de los vecinos del barrio que reivindicaron siempre este espacio y le quisieron dar un uso colectivo.
Recuerdos del mercado
La exposición trata de recrear el ambiente de un mercado. Y a través de esta recreación, se divide en 6 ámbitos, donde se explica la evolución del mercado, desde los momentos que los puestos se instalaban en la calle hasta la actualidad. Explica cómo hubo en el siglo XIX un plan de reordenación de los lugares de venta de Barcelona, que fue posible gracias a la disponibilidad de espacios derivada de las desamortizaciones y el derribo de numerosos edificios religiosos. La reurbanización de la antigua Ciutadella permitió hacer un gran mercado en hierro, al estilo de los que estaban de moda en la época. El concurso lo ganó Josep Fontserè, quien intentó hacer un mercado muy grande, muy ambicioso. Sería el primer gran mercado de la ciudad, al que muy pronto seguiría Sant Antoni. Son mercados que, pese a la gran inversión, no conseguirían un gran éxito. Y como los mayoristas estaban dispersos por la ciudad y provocaban muchas molestias, en 1921 se decidió concentrarlos a todos en el Born, para descongestionar otros espacios. Y el antiguo mercado minorista se reconvertió en un mercado específicamente mayorista.
El mercado de la memoria
El mercado mayorista duró hasta 1971, en que los mayoristas de frutas y verduras fueron trasladados a Mercabarna. Es este el periodo al que más atención dedica la exposición, porque es el más recordado por los ciudadanos. Queda mucha gente viva que fue al Born a comprar para las verdulerías, o que trabajó cargando inmesos cestos, o que visitaba los recaderos situados a su alrededor y que enviaban paquetes a los sitios próximos a Barcelona... La exposición trata de recopilar experiencias y recuerdos vinculados al antiguo mercado mayorista, con una importante recogida de fotografías, y también con fragmentos de entrevistas a la gente que había vivido experiencias en este mercado. La muestra también dedica un espacio al estudio arquitectónico del edificio, para terminar centrándose en los 45 años de luchas vecinales en torno al Born.
Materiales desconocidos
En esta exposición se presentan algunos materiales que hasta ahora no eran conocidos. Por ejemplo, se han localizado los planos de la construcción del Born en el Arxiu de la Corona d'Aragó, y algunos de ellos se exponen aquí. Pero también destacan la importancia de las entrevistas realizadas durante dos décadas, que han permitido compilar las experiencias de los ciudadanos. Además, se ha podido clasificar y ordenar materiales, como fotografías de Pérez de Rozas sobre la colectivización anarquista durante la guerra civil, que hasta ahora bían pasado desapercibidas. Los comisarios también destacan que esta investigación ha permitido recuperar el periodo en que este espacio era un mercado minorista, frente a la visión general de que el Born había sido, desde siempre, el mercado mayorista de la ciudad.
Llamamiento a la participación
Manel Guàrdia apunta que los comisarios han querido que esta exposición fuera un instrumento para revivir la historia del mercado. Por eso se ha creado un espacio muy especial, ELa paradeta de la memòria, en que se hace un llamamiento a que los ciudadanos que tengan material gráfico sobre el Born aporten sus documentos, que serán escaneados y devueltos a sus propietarios. De esta forma, con la colaboración del Observatori de la Vida Quotidiana, se quiere recuperar una dimensión auténticamente popular de la memoria de la ciudad. En este work in progress ya se han empezado a recopilar materiales, que están destinados a la creación de un gran archivo oral y visual de la ciudad con participación de sus habitantes. Los comisarios argumentan que, en contra de muchos estereotipos, se ha constatado que hay fotografías familiares de una gran calidad técnica.
Actividades complementarias
La exposición va acompañada de un rico programa de actividades, con varios itinerarios y visitas guiadas por el Born, y por mercados y espacios vinculados a su historia. Con la Agrupació d’Arquitectes per la Defensa i la Intervenció en el Patrimoni Arquitectònic (AADIPA) se han preparado unas jornadas sobre la arquitectura en hierro y también se han previsto varias mesas redondas sobre el tema de los mercados y sobre el papel del Born en la transición. Y el Espacio Gastronómico Els 300 del Born ofrecerá durante este periodo "esmorzars de forquilla", en recuerdo de la cocina típica de los mercados y a los contundentes desayunos que tomaban sus trabajadores. Paralelamente, habrá dos exposiciones de pequeño formato, como complementos de la principal. Una de ellas, Fer mercats, fer ciutat, está integrada por dibujos de la red de mercados, y se podrá visitar del 4 de abril al 2 de julio. La otra, El Born reivindicat, que se podrá visitar del 11 de julio al 26 de noviembre, recuerda el periodo de luchas vecinales, de 1971 a 2001, en que las agrupaciones del barrio consiguieron salvar el espacio, mientras que en otras ciudades mercados similares eran derribados. Coincidiendo con esta exposición habrá un debate sobre las reivindicaciones ciudadanas en torno en el Born. Una de las actividades que se hizo en este espacio fue la representación teatral de Don Juan Tenorio, de Mario Gas; y con motivo de esta exposición se repondrá esta obra. Y para cerrar la exposición, en recuerdo de las grandes fiestas que había organizado el vecindario en el Born durante los años de movilizaciones, el Ayuntamiento ha decidido cerrar la exposición con una gran fiesta popular, gratuita, el 28 de octubre.
Ampliar en 1714
Tras de la polémica surgida en el Born, Centre de Cultura i Memòria con la exposición sobre las estatuas franquistas de la ciudad de Barcelona, el Ayuntamiento parece decidido a dedicar el espacio a una memoria más amplia que la de 1714. Frente a algunos sectores que vuelan que el Born se mantenga exclusivamente como un espacio consagrado a la memoria de la Guerra de Sucesión, el Comisariado de Programas de la Memoria apuesta para incorporar otros temas de la memoria colectiva barcelonesa y catalana en este espacio. De hecho, se está realizando un concurso público para escoger al nuevo director de la institución, que trabaje en esta línea. La reivindicación del mercado del Born como un espacio de integración vecinal parece estar en esta línea, y profundiza en otra de las líneas del equipo consistorial: el intento de generar una memoria colectiva con la colaboración de los vecinos.