CaixaForum Barcelona, en colaboración con el Museo del Prado, acoge la exposición "XIX. El siglo del retrato" en que se exhiben 173 obras de grandes artistas como por ejemplo Goya, Zuloaga, Mueve, Fortuny, Martí Alsina o Nonell. La muestra se podrá visitar hasta el 4 de junio.
"El Prado, a lo largo de su historia, ha dedicado varias exposiciones al retrato, pero esta es la primera que lo aborda en todas sus manifestaciones", explica el jefe de Conservación de Pintura del siglo XIX del Museo Nacional del Prado y comisario de la muestra, Javier Barón. El comisario se refiere así a las muchas esculturas, medallas, miniaturas, fotografías, dibujos, acuarelas y estampas que acompañan las pinturas, que con un total de 81 retratos conforman la parte principal de la exposición.
Pues bien, la exposición no sigue un orden cronológico y se divide en ámbitos temáticos: "La imagen del poder", "El descubrimiento de la infancia", "Identidades", "La imagen de la muerte", "retratos y autorretratos de artistas", Effigies amicorum, Imágenes de escritores, músicos y actores" y "El artista en el estudio".
Se trata de un orden expositivo que "ofrece a los visitantes la posibilidad de adentrarse, a través de un género de importancia primordial en la pintura española, en una época que estableció las bases económicas y sociales de nuestra contemporaneidad", según ha explicado a directora general adjunta de la Fundación "la Caixa", a Elisa Durán. "El siglo XIX es el siglo del retrato porque es el siglo del individuo. Es el inicio de una forma de producción nueva, el capitalismo, que favorece el individualismo," ha remachado Javier Barón.
Concretamente, el primer ámbito de la exposición, "La imagen del poder", exhibe la pérdida progresiva de importancia del retrato real y el aumento del poder de ministros, empresarios y políticos, como Jovellanos, retratado por Goya en la obra maestra que se puede ver en el CaixaForum. En esta primera sala también se encuentran dos estudios preparatorios de Goya para su gran retrato de la familia de Carlos IV y la obra Ferran VII en un campamento.
El recorrido continúa por el espacio dedicado a la infancia, que ganó protagonismo en la pintura del siglo XIX gracias a la influencia de Jean-Jacques Rousseau. Para él, esta etapa de la vida representaba la inocencia y la espontaneidad. El siguiente apartado, "Identidades", es una zona dedicada a las mujeres, que toman especial protagonismo en este momento histórico, según ha comentado Elisa Durán. Donde se pueden encontrar más retratos de mujeres está en la sala dedicada a la representación de la burguesía, donde destaca La señora de Delicado de Imaz, de Vicente López Portaña.
La exposición también aborda el tema de la muerte, algo que siempre ha despertado interés entre los artistas. Estos retratan personas muertas y momias, tal como se muestra en la exposición. La muestra acaba con retratos y autorretratos de artistas. Entre ellos destaca el estudio del retrato que Philip Alexius Lászalo de Lombos hizo de Elinor Glyn, escritora que acuñó el concepto de it girl.
"El retrato es un género curioso porque primero muestra la personalidad del retratado, pero al cabo de dos o tres generaciones cobra más importancia la personalidad del retratista", ha señalado el director del Museo Nacional del Prado, Miguel Falomir.
Hasta el 4 de junio, tienes tiempo de ver una de las exposiciones más importante del año. ¡El CaixaForum Barcelona te espera, no te la pierdas!