Nada ha cambiado en los informativos y tertulias de 13tv, la televisión de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que sigue "fomentando los sentimientos contrarios al respeto, la tolerancia, el diálogo y la solidaridad" respecto a Catalunya y a los catalanes. Es lo que dice, "con todo el respeto pero también con toda la contundencia", la carta que un grupo de 26 sacerdote de la archidiócesis de Tarragona ha hecho llegar al presidente de la CEE, el cardenal Ricardo Blázquez.
Por eso le piden que, "sin dilación y con valentía, corrijan o supriman los programas de tertulia en 13tv, que tanto daño hacen a la convivencia y ensucian la imagen de la Iglesia Católica, que siempre debe fomentar el diálogo sincero y fructífero".
Los firmantes representan casi la mitad del clérigos con responsabilidades pastorales en la archidiócesis, explica Catalunya Religió. Entre ellos figuran el rector del seminario, tres arciprestes, el delegado de juventud y vocaciones y el de pastoral social y párrocos de todas las edades, ha explicado a El Nacional uno de los firmantes, Josep Mateu, rector de Riudoms y Vinyols i els Arcs. Los sacerdotes "han escuchado repetidamente las quejas" de muchos fieles y dicen que "no podemos callar más ante las opiniones, que, noche tras noche, se expresan en las tertulias de 13tv".
Desprecio e insulto
En octubre de 2013, recuerda la carta, los obispos de Catalunya ya manifestaron que algunos de los informativos y tertulias de 13tv producen "un grave escándalo en muchos miembros de la comunidad católica de nuestras Diócesis y también en nosotros mismos" porque un canal "que tiene que respetar las personas y las instituciones según su ideario (...) opta por el desprecio, la descalificación e incluso el insulto".
Cuatro años después de aquella declaración, "en las tertulias de este canal de televisión, ligado a la CEE, se siguen fomentando los sentimientos contrarios al respeto, la tolerancia, el diálogo y la solidaridad. En estos últimos días, después de los atentados en Catalunya, la agresividad de los tertulianos y de los responsables del programa se ha hecho, si cabe, todavía mayor", dice la carta.
Los curas desean que en 13tv se escuchen las palabras dichas por el papa Francesc este año a los profesionales de la comunicación, a los que pedía ejercer "de forma constructiva rechazando los prejuicios contra los otros", según un modelo que "fomente una cultura del encuentro que ayude a mirar la realidad con auténtica confianza".
"Muchos sacerdotes del resto de Catalunya y de España nos han llamado para manifestar su apoyo", ha explicado Mateu. "Es un tema antiguo del que nos hemos lamentado hace tiempo. Ahora, con motivo de los atentados en Barcelona y Cambrils, y el mensaje del Papa, el país está más sensible. Muchos fieles, doloridos por esta situación, nos lo han hecho saber. Era el momento de añadir nuestro grano de arena y manifestar que estamos cansados".
Mossén Mateu ha añadido que también quieren "mostrar el rostro de esta iglesia, que es la real y mayoritaria. Desde el respeto. Visibilizar la iglesia catalana, que es dialogante y está arraigada y que nuestros cristianos se sientan representados".
Culturalmente pobre
El catálogo de ejemplos de l'a actitud que denuncia la carta es amplio y variado: una tertuliana dice que hay que fusilar a los partidarios del referéndum; el "llevo escolta porque ya sabemos qué pasa en Catalunya" de la jefa de la oposición Inés Arrimadas; o el exministro Margallo utilizando a la esposa de Puigdemont para cargar contra el procés. Es interminable.
Tampoco es la primera vez que la CEE recibe quejas del mundo católico catalán sobre 13tv. Entre las más notables figura otra carta de un grupo de laicos cristianos vinculados a la política, el pensamiento y la comunicación, y algunos asesores de la Santa Sede, representantes de un amplio abanico de sensibilidades católicas. En la carta, de octubre de 2013, titulada "13TV o la destrucción del diálogo" denunciaron a la Conferencia Episcopal Española "el escándalo" y la "intoxicación mediática" del canal.
Un informe presentado a los obispos por el anterior presidente de la televisión la identifica como "eminentemente política con una marca definida a la derecha", con un perfil "culturalmente pobre" y que "no es plural desde un punto de vista religioso". El informe, revelado por eldiario.es, recomendaba "un cambio de guion": más programas socio-religiosos y distanciarse del PP.
Pérdidas de 63,5 millones
13tv es propiedad del Grupo Radio Popular, del que la Conferencia Episcopal Española tiene el 51%, y algunas diócesis y órdenes religiosas, como jesuitas y dominicos, un 21%. La intención de los gestores al lanzar este canal, en 2010, era dirigirlo a gente "que no busca la crispación política o la degradación moral de las personas, y que propugnará y dará apoyo valores tradicionales como la familia, la dignidad y la honestidad". En su web explican que hacen "una clara apuesta por la defensa de los valores del humanismo cristiano".
La audiencia media de este año es de un 2% y la máxima histórica del 2,5%, de enero de 2016. Las pérdidas de la cadena suman 63,5 millones de euros desde 2010, el triple de su presupuesto anual, que es de cerca de unos 20 millones.
Reconducir económica y editorialmente 13tv es una tarea pendiente de la CEE. En diciembre del 2016, con este afán, la propiedad nombró presidente ejecutivo del canal a Fernando Giménez Barriocanal, un peso pesado del entorno católico oficial —es vicesecretario para Asuntos Económicos de la CEE. Topó con un consejo de adminstració dividido entre los partidarios de reformar a fondo, como él, y los inmovilistas, que encabeza José María Mas, el vicepresidente.
Tres meses antes, en Barcelona, Barriocanal había explicado que sus planes incluían aplicar una estrategia "menos politizada y más social" a la tele católica. Es la misma que recetó a la Cope en 2009 y acabó con la salida de Federico Jiménez Losantos y César Vidal, principales conductores de aquella radio y tótems de la llamada Brunete mediática. "Este mismo camino tiene que hacerse en 13TV", añadió. Barriocanal pidió ser relevado el pasado mes de marzo por su hombre de confianza, Julián Velasco. No debe ser fácil.