Hace 25 años, Ovidi Montllor nos dejaba. Y pese a todo, hay quien considera que sus canciones son todavía necesarias. El BarnaSants ha decidido inaugurar su 25 edición con un concierto de homenaje a Ovidi: Ovidi 25. Será el viernes 24 de enero, a las 20h30, en las Cotxeres de Sants. Pero han decidido no dejarlo aquí, sino que se darán siete conciertos de homenaje a Ovidi. El sábado 25 de enero el espectáculo pasará por Centelles, el 15 de febrero por Castelldefels, el 22 de febrero por Girona, el 14 de febrero por Manacor, el 27 de marzo por Vilafranca del Penedès y el 29 de marzo por Balaguer. Las entradas para el Ovidi 25 y para los otros conciertos del BarnaSants ya están disponibles en la página web del festival.
Los nuevos herederos del Ovidi
El espectáculo va a cargo de David Caño, David Fernández, Borja Penalba y Mireia Vives. Se trata de músicos jóvenes que no habían conocido directamente a Ovidi, pero que han conectado con su música y con su manera de ver el mundo a través de conocidos o de grabaciones diversas. David Fernández ha llegado a considerarlo como "el Leonard Cohen de los Països Catalans". Todos ellos coinciden en destacar que el de Alcoi es un cantautor muy versionado, desde todos los estilos, porque "es un referente, no sólo musical, sino también ético y político, que la gente busca" y que se ha situado en la memoria popular desde la base, gracias a que su recuerdo motiva a los ciudadanos y no a homenajes institucionales, porque fue un hombre que siempre se mantuvo al margen del poder. Por eso este homenaje ha sido preparado "desde las tangentes", al margen de las grandes instituciones musicales catalanas. Fernández ha destacado que Ovidi, en nuestros días, que "continúa tan vigente que parece que ha canciones que fue compuesto ayer por la noche". Al fin, reivindica que Ovidi es "un compañero que te acompaña en los momentos buenos, pero también en los momentos más jodidos". Y apunta que Montllor destacó en un País Valencià en que "la música ha sido un espacio de resistencia cultural, lingüística y política". E insiste en que Montllor fue alguien que reivindicó "desacomplejadamente" los Països Catalans.
Un Ovidi de hoy
David Caño ha afirmado que aunque el grupo ya había hecho dos espectáculos anteriormente sobre Ovidi Montlor, Ovidi 25 será un espectáculo nuevo, con canciones y poemas no interpretados anteriormente, y con una reinterpretación de los viejos. Borja Penalba promete el espectáculo más ovidiano de los que han hecho, en los que la gran mayoría de las canciones serán de Motllor. Aunque Fernández reconoce que "en dos horas es imposible recoger todas las facetas del Ovidi", pero ha asegurado que con el tiempo disponible intentarán dar una perspectiva global del cantautor. El concierto estará estructurado en cuatro partes: un bloque "muy valenciano y muy reivindicativo", otro sobre la conciencia social del Ovidi (vinculado a lo que está pasando ahora mismo), uno tercero sobre la memoria (con un especial gesto para la Teresa de la canción) y finalmente se entrará en el Ovidi corrosivo que se enfrenta a las miserias de la condición humana. No obstante, ha dejado claro que no intentarán reproducir su estilo: "No podemos imitarlo, porque es inimitable, pero podemos seguir su hilo". No lo harán solos: prometen que cada concierto contará con sorpresas, con actuaciones de músicos que admiran la obra de Ovidi, y que también incluirá un pequeño recuerdo para Isabel-Clara Simó, también alcoyan y amiga de Ovidi.
Un BarnaSants que se renueva
Pere Camps, director del BarnaSants, ha explicado que en esta edición se llegará a los 135 conciertos, con actuaciones en el Principat, pero también en el País Valencià, y en Mallorca, Menorca y Formentera. Ha prometido mantener el compromiso con la cultura y la lengua catalana "a partir de un espíritu inequívocamente internacionalista" y ha asegurado que, con el crecimiento del festival, "eso ya no hay quien lo pare". Ahora bien, ha prometido una reforma en profundidad del festival mediante un relevo generacional de la directiva, la creación de un "ateneo de la canción" y con una revisión de las fuentes de financiación, preservando la independencia del festival. Para asegurar la continuidad del festival en condiciones dignas, a partir del viernes 24 se iniciará una campaña de micromecenazgo en la plataforma goteo.org. Pese a todo, Camps no renuncia a solicitar más ayudas: "Exigimos la parte que nos corresponde de lo que pagamos con nuestros impuestos", aclara. Denuncia que las subvenciones a la cultura son pocas y que suelen llegar tarde, "Es más fácil que te den una medalla que apoyo real, especialmente cuando el apoyo real es para un proyecto que cuestione el sistema", ha ironizado. Camps confía mucho en el potencial revolucionario de la cultura: "Entendemos la cultura como una herramienta de transformación social, el kalashnikov del siglo XXI".